Guía de turismo - Relatos Eróticos

Guía de turismo

... consolador poco a poco fue metiendome una a una bola en mi ano, hasta que me metió todas, fue algo tremendamente duro para mi me dolía mi ano y mi vagina pero lo disfrutaba tremendamente entonces empecé a llegar a un orgasmos ella se dio cuenta y justo en el momento del orgasmos me fue sacando una a una las bolas que me había metido en el ano jalando de cuerda donde estas estaban sujetadas, tuve un orgasmo impresionante, nunca había tenido uno tan largo pero fue sensacional. Ni un solo instante escapo de la filmación, entonces me recosté un momento toda adolorida, y después de un instante me recupere entonces fui yo la que me asome a la bolsa de los artículos que habían comprado para ver que mas había y me tope con un consolador de igual tamaño que el que me había ella introducido, pero este tenia un cinturón para ponérmelo, entonces me lo puse, me acosté sobre de ella y la penetre ella al principio grito de dolor pero después solo gritaba de placer, yo le estaba dando igual o mas duro de como ella me lo había hecho a mi, entonces le dije que se pusiera en cuatro y yo desde atrás la penetre, era raro para mi sentir esa sensación ya que nunca lo había hecho y a mi me gustaba que me lo hicieran, después de un rato de ...

... estárselo haciendo saque el consolador y de un solo golpe y sin lubricarla se lo introduje hasta el fondo de su ano, ella del dolor hasta derramo algunas lagrimas pero después de un momento ella lo estaba disfrutando así que lentamente me dispuse a sacar el consolador de su ano y se lo metía a su vagina, le he de haber hecho unas seis o siete veces cuando ella como una perra en celo tenia un orgasmo brutal. Caímos las dos sobre la cama nos habíamos olvidado de lo cámara y de su esposo al voltear vimos que el tenia un tremendo bulto, entonces ella le dije que por que no nos enseñaba como se masturbaba, entonces el saco su tranca brillosa por sus propios líquidos y empezó a masturbarse delante de nosotras dos, nosotras seguíamos juntas acostadas sobre la cama, entonces el dijo me voy a venir, y le dije yo que por que no eyaculaba sobre de nosotras, el se arrimo rápido y su tranca empezó a escupir semen que quedaba embarrados en nuestros senos y parte del abdomen al terminar el una a la otra nos lamimos el cuerpo para comernos el semen que se había depositado sobre nuestro cuerpo, hasta que no quedo rastro alguno. Esa fue nuestra ultima noche juntos pero no los olvidare nunca, fue algo sensacional, espero verlos nuevamente.