Mis compañeros me convirtieron en Camila (II)
Fecha: 15/11/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: camitv, Fuente: CuentoRelatos
... pasaba. Como siempre Manuel conservo la sangre fría y sin dejar de penetrarme me susurro al oído. —dile que no pasa nada que ya vas a salir que la ves en la caja Obedecí y tras tragar saliva y tratar de calmarme lo más posible respondí con voz entrecortada y semi jadeante lo que Manuel quería, Manuel para hacer más cruel mi tortura me embistió con más brutalidad mientras le contestaba a la dependienta. La otra chica contesto afablemente y escuchamos como se retiraba. Esa situación excito sobremanera a Manuel quien unos segundos después y tras penetrarme con fuerza se descargó en mi de manera violenta y abundante. —fue delicioso princesa estar a punto de que nos atraparan me excito muchísimo deberíamos repetirlo otro día. Ahora, en cuanto te la saque, apúrate y ponte rápido las bragas, no queremos que cuando escurras mi leche ensucies todo. Obedecí pero aun así por lo abundante de su leche algunos grumitos cayeron a la alfombra, aunque la mayoría resbalo por mis muslos, iba a limpiarlos cuando Manuel evito que lo hiciera —déjalo así princesa —pero… Manuel pareció reconsiderarlo y me dejo seguir aun así una sonrisa se dibujó en su rostro. Manuel abrió la puerta y me ayudo a cargar todo, en la caja la dependienta me vio de manera recriminatoria, ella sabía muy bien lo que estábamos haciendo en el probador y porque había tardado tanto, a mí se me caí la cara de vergüenza y supongo que lo único que evito que nos delatara fue la compra que hicimos. Salimos de allí rápidamente, ...
... estaba totalmente sonrojada y no sabía ni dónde meterme. Subimos al segundo piso y tras que Manuel se compró un par de camisas terminamos en lencería, no tardamos mucho allí y la señorita que me ayudo creo que convenció a Manuel de que comprara demás. En zapatería fue más rápida la visita y termine con un par de bolsas más Salimos de la tienda y vagamos un rato por el centro comercial, visitamos tres o cuatro tiendas mas de las cuales salí con mas bolsas por lo que Manuel decidió regresar al auto para dejar todo eso y poder seguir comprando sin problemas. Tras esa pequeña pausa volvimos de compras, anduvimos de tienda en tienda, comprando aquí y allá, regresamos un par de veces más al auto y tras acomodar todo nos dirigimos a buscar lo único que faltaba, la lencería, había 5 tiendas exclusivas de lencería en el lugar y las visitamos una por una, en la última que era la más exclusiva, Manuel se detuvo en la puerta. —toma, esta tarjeta es solo para que te gastes todo el crédito aquí, así que compra todo lo que quieras no debe de quedar nada en ella, este es el número de cliente para que te facturen todo. Voy por algo de beber, no creo tardar así que tomate tú tiempo. Manuel tomo todas las bolsas que portaba, me dio una nalgadita al entrar y lo vi irse. Al fijarme en el lugar era enorme, las tiendas anteriores eran pequeñas y sin variedad ante lo que veía. De inmediato una señora se acercó a mí para preguntarme que deseaba. Invente la historia de un cambio total de guardarropa y que ...