La culpa fue del alcohol 2 - Relatos Eróticos

La culpa fue del alcohol 2

... dije, en una situación muy incómoda, ya que estaba haciendo de vientre, "quiero que me mames la verga y te tragues mi leche", me dijo, acercando su verga a mi boca y acariciando mis tetas Yo lo miré, pero estábamos tan calientes los dos, que abrí mi boca y le empecé a mamar su verga mientras el manoseaba mis tetas, yo movía mi cabeza para adelante y para atrás, sintiendo como la verga de mi hijo entraba y salía de mi boca, hasta que Camilo la mete casi toda en mi boca y siento los chorros de leche, calientes, espesos, llenando mi boca, sus gemidos, como temblaba de placer al estar escurriéndose en la boca de su madre, hicieron que me meta la mano y acaricie mi cuca, sentada en el inodoro, yo deje que se escurra bien dentro de mi boca, pero no la había tragado, cuando saco su verga, lo miro y abro mi boca, dejando que vea lo llena que tenía mi boca con su leche y la fui tragando de a poco, "ahora sal que ya termino", le dije, haciendo que mi hijo salga del baño y poder hacerme la higiene tranquila. Salí del baño y estaba Camilo acostado en la cama con su verga medio flácida, yo la empecé a acariciar, hasta hacer que se ponga dura de ...

... nuevo, y con mi mano la volvía a meter en mi cuca Sintiendo esa hermosa y dura verga de nuevo dentro mío, "así, vuelve a coger a tu madre que esta muy caliente", le dije moviendo mis caderas ahora yo sobre mi hijo, "a tu padre lo estoy engañando contigo hijo, y lo he engañado con su amigo Luis", le dije, moviendo como loca mis caderas sobre mi hijo y apretando y estrujando mis tetas, "Luis por donde te cogió mami?", me pregunta mi hijo, moviendo su cintura, "por todos lados, como me estas cogiendo tú, le he tragado su leche, me cogió por el culo y por la cuca", le decía yo desesperada por escurrirme de nuevo con mi hijo, hasta que siento como Camilo se empieza a escurrir dentro de mi cuca Siento los chorros débiles, pero me dieron mucho placer, hasta el punto que yo me empecé a escurrir como loca, gritando, apretando mis tetas, haciendo fuerza hacia abajo, como no queriendo sacar nunca la verga de mi hijo de mi cuca, sentía como me caía la saliva sobre el pecho de Camilo, hasta caer mas que satisfecha y rendida al costado de mi hijo, respirando muy agitada, "vamos a descansar hijo y luego me sigues cogiendo", le dije, besando sus labios.