esta serie debe estar aqui 3 - Relatos Eróticos

esta serie debe estar aqui 3

... Unidos y paso al rancho a visitar a Venusiano 3 días antes y este le dijo que mi madre y mis abuelos llegarían pronto por lo que el decidió esperarnos. Al verme extendió los brazos y me dijo: Manuel: Mira nada más que tenemos aquí, es Mayren. Yo aún recuerdo cuando de pequeña me sentaba en sus piernas y el me cantaba con la guitarra. Por lo que corrí a abrazarlo. Ese abrazo fue muy fuerte, pues sentí como mis pechitos se aplastaban contra su enorme pecho, pero me pareció muy divertido. Los primero días transcurrieron fenomenal, mis hermanas no querían estar en el rancho por lo que seguido estaban en la ciudad, yo con mis abuelos y mi tío no paraba de platicar y reír de todas las bromas y anécdotas chistosas que me contaban. Mas o menos el tercer día quise ir a nadar y asolearme en el río por lo que le pedí a mi abuelito que me acompañara. Montamos a caballo y fuimos al río, mientras mi abuelo se acostaba en el pasto a leer sus revistas chistosas, yo me desvestí quedándome en bikini, mire a mi abuelo y el parecía estar bastante entretenido en su revista así que me metí a nadar al río, al poco rato me canse y salí dispuesta a asolearme por lo que me tire boca abajo a un lado de mi abuelo. Al poco rato oímos un caballo que se aproximaba. Era mi tío Manuel que venía a hacernos compañía yo no me moví y solo lo salude y le dije que me estaba bronceando. Manuel: wow en lo que se ha convertido mi sobrinita apoco no padre. Humberto: si ya dejo de ser la niña de pequitas, y mira nada ...

... más ya es una mujer muy bonita. Sentí las miradas de ambos en mí pero no le di mucha importancia, al fin y al cabo eran familia. Estuvimos un tiempo ahí y regresamos los 3 a la casa donde nos esperaba una rica comida. Ya por la noche todos nos fuimos a dormir, pero en la noche me desperté con una sed tremenda. Me levanté y fui a la cocina pero para llegar a esta tenía que atravesar prácticamente todo el pasillo donde se encontraban los cuartos ya que el mío era el último. Como carece de luz el pasillo me fui despacio, todo permanecía en silencio, pero al llegar al último cuarto que es donde duerme mi abuelo con mi abuela escuche moverse la cama con brusquedad como si la estuvieran arrastrando. En seguida pensé que mis abuelos debían estar recordando viejos tiempos, sonreí y me dispuse a seguir mi camino cuando escuche un: AAAAyyyy que rico culo tienes. Era la voz de mi abuelito, sentí una extraña sensación en mi cuerpo y me dio curiosidad ver lo que ocurría dentro de la habitación, recordé que en el patio hay una ventana que da hacia el cuarto de mis abuelos en la parte alta de este y me fui hacia el patio sintiendo miedo de ser descubierta pero a la vez una rara sensación que me gustaba. Llegando al patio coloque una caja de refrescos que estaba en el suelo para subirme a ella y llegar a la ventana que estaba muy alta para mí. Al hacerlo vi la escena mas impactante que he visto en mi vida papi… no se la verdad si deba decírtelo. Joaquín: dímelo hijita tenme confianza. Mayren: ...