DERRAMADA SOBRE TI - Relatos Eróticos

DERRAMADA SOBRE TI

Hay veces en la que disfrutas con una práctica sexual no solamente porque sea placentera, sino también porque tiene un significado especial.Algunas amigas me han contado que sus novios les practican sexo oral simplemente porque ellas se lo piden y ellos quieren hacerlas disfrutar, de tal manera que en la práctica hay un doble goce, el puramente físico y uno más intenso, emocional, que te lo da el saber que esa persona quiere complacerte. Lo mismo ocurre cuando tu novia acepta que te corras en su cara, cosa que hace porque sabe que te gusta y quiere que lo pases bien, aunque ella no le da ningún placer físico.En mi caso, con los chicos que he tenido algún tipo de relación que iba más allá del sexo, ya fuesen novios o simplemente compañeros de un verano, lo que me gusta hacer es correrme sobre sus penes. Lo sé, lo sé, muchos de vosotros habéis puesto cara de “¡¿Qué diablos?!”, pero no puedo evitarlo, es una cosa que me encanta.Físicamente me parece que es una experiencia agradable. El chico se tumba y yo me coloco sobre él, y cada uno masturba al otro. Generalmente empezamos con suavidad, pero a medida que la cosa se calienta vamos echándole más fuerza y aumentando el ritmo, hasta el punto de que realmente no pierdes el control. Y eso que masturbarme a mí misma no me gusta nada, pues se me hace aburrido y monótono, pero cuando te lo hace otra persona es diferente, pues quedas sometida a uno estímulos que no controlas.Emocionalmente, me parece una auténtica gozada cuando ...

... siento que me voy y veo como él dirige mi pene hacia el suyo, de tal manera que me derramo completamente sobre él. Me gusta porque me parece muy tierno por su parte, pero también porque disfruto enormemente al ver su cara de sorpresa teñida una mirada de placer prohibido. Esto no es extraño en abosluto, ya que la sensación de que se corran sobre tu pene, sobre todo cuando está tan sensible y resulta tan fácilmente estimulable, es simplemente gloriosa. Una vez, el resultado fue que el chico se corrió sin necesidad de que le hiciera nada, simplemente tuvo que sentir mi calidez fluyendo. La mayoría de las veces, bastan unas pocas sacudidas para que la sesión acabe también por su parte.Es curioso, porque aunque a los chicos el semen suele daros cierto repelús, cuando acabamos es bastante común que os quedéis contemplando el resultado, incluso que lo toquéis con bastante curiosidad y hasta yo diría que cierto deleite. Debo decir que yo, después de acabar, me pongo muy tonta y melosa, y obviamente eso ayuda a sentirse cómodo. Una cosa importante para mí es no juzgar nunca: si has disfrutado, ha sido estupendo y me alegro por ti. Si me puedes explicar cómo me sientes, yo seré la mujer más feliz del mundo al escucharte.Cada pareja debería tener sus propios juegos de este tipo. No sé si harán que la relación vaya mejor, pero sin duda hacen que se viva con más intensidad, que tengas recuerdos y experiencias que no has tenido con otras personas, que os sintáis ambos especiales.