Relatos eróticos lésbicos: Mi regalo de cumpleaños
Fecha: 27/11/2018,
Categorías:
Lesbianas
Autor: Dana Lao, Fuente: CuentoRelatos
... Beth se puso en seguida de rodillas y llevó sus labios a mi coño que ya estaba empapado a causa de sus besos y comenzó por dar leves y deliciosas lamidas. Poco a poco fue subiendo de intensidad y yo abriendo más mis piernas para dejarla comerme toda. Ella succionaba mi clítoris despacio, y me metía su lengua hasta el fondo, después me besaba el coño como si se tratara de la boca, lenta y deliciosamente. Me comía riquísimo. Yo solamente apretaba los puños y me mordía los labios para no gritar, pues aunque abajo el ruido era mucho, no quería que nadie alcanzase a escuchar lo que pasaba al interior de mi habitación. Beth llevó uno de sus dedos a mi vagina y comenzó a dedearme mientras seguía haciendo lo suyo con la lengua, hasta que terminé en su boca y ella saboreó todos mis jugos y finalizó con un: "me encantas bebé, ahora soy adicta a ti". Tras lo cual me puse una tanga limpia y bajamos de nuevo a la fiesta. Todo seguía muy animado, hasta que a eso de las 3:00 am, varios comenzaron a irse. Sam ya estaba un poco pasada de copas y ya solo quedábamos unos cuantos, yo platicaba con Beth. Entonces Sam fue hasta nosotras y abrazándome por la espalda nos dijo: chicas, han besado alguna vez a 2 personas al mismo tiempo? Ambas respondimos que no y para mi ...
... sorpresa, Sam me pidió que besara a Beth. Debo confesar que la simple idea me calentó, así que lo hice y Beth me respondió el beso abrazándome por la cintura. Unos segundos después, Sam se unió, cruzando su lengua con las nuestras y eso fue súper excitante, sin mencionar que nuestros amigos nos animaban a seguir. Brindamos una última vez y repetimos la escena del beso triple un par de veces más. Tras lo cual llevé a Sam a casa. Beth y yo volvimos y nos quedamos hasta las 5 am hablando de tonterías en la sala. Luego ambas nos sentimos cansadas y decidimos subir a dormir, pero apenas tocamos la cama, nos quitamos la ropa, comenzamos a besarnos de nuevo y Beth me confesó que el beso triple la había dejado muy excitada. Entonces nos tocamos y dejamos que nuestros cuerpos desnudos fueran por donde les diera la gana. Toqué y besé cada parte de ella y ella de mí hasta que finalmente el sueño nos venció y amanecimos desnudas en mi cama. Después de un baño y un rico desayuno, llevé a Beth a la terminal de autobuses, donde nos despedimos con un beso en los labios y un abrazo. Fui a recoger a Sam, quien me esperaba para ir al cine. Mientras esperaba por ella en el auto afuera de su casa, recibí un mensaje de Beth que decía: "Eres la mejor preciosa, ya quiero verte de nuevo".