1. El novio de mi herm,ana...


    Fecha: 27/11/2018, Categorías: Gays Autor: renovatio111, Fuente: xHamster

    ... Rubén...-Vamos, nen... ven con Rubén... –dijo él entre risas. Lo peor de todo es que iba en serio.Mi hermana y yo empezamos a pelearnos de broma, aunque en más de una ocasión pensé en empujara de verdad para tirarla de una puta vez al agua. "Es tu hermana" me repetía mi conciencia, "No puedes matarla, al menos no aquí, delante de tanta gente". Pero las manos de mi cuñado apretándome los muslos para sujetarme, hicieron que dejara de pensar en acabar con la vida de mi hermana y me dedicará a disfrutar del roce. Tanto fue así, que me empalmé y dejé de pelear con ganas hasta que mi hermana me tiró de los hombros de mi cuñado.-¡Chaval eres un blando! –Me soltó ella-. Papá, somos los mejores...Cuando saqué la cabeza del agua, Rubén me ayudó a ponerme derecho. Sus brazos rozaron mi cintura. Su gesto me pareció incluso cariñoso. Me apoyé en su pectoral durísimo para estabilizarme. Tuve que contenerme para no empezar a lamérselo en aquel mismo momento. Se acercó a mi oído y me susurró:-Tu Rav4 se ha puesto muy duro, nen... Y me gusta.Ufff... ni en mis sueños más húmedos me imaginé al chulazo del novio de mi hermana decirme al oído delante de ella que le gustaba notar mi polla dura en su nuca. Seguimos jugando entre apretones y caídas. Me dejé ganar sistemáticamente para poder rozarme aún más con la espalda y los hombros de mi cuñado. En repetidas ocasiones, Rubén me sobó el culo para sacarme del agua y yo, cada vez con menos disimulo, le rozaba las piernas y el torso al levantarme. ...
    ... En una de mis últimas sumergidas, incluso me atreví a tocarle el paquete por encima de la ropa fingiendo estar desorientado por la caída. Jamás me había divertido tanto en un parque acuático.Pero después de 20 minutos de roces, ya no podía más, me dolía la polla de lo dura que la tenía. Así que desmonté a mi cuñado y me di un tiempo muerto a mí mismo para irme al lavabo. Volví a los vestuarios y entré en los servicios. Como estaban vacíos me puse a mear en un urinario de pared. Con la polla fuera, intentaba pensar en algo negativo para que se me bajara la erección, pero el recuerdo del contacto con el cuerpo de mi cuñado no ayudaba mucho. En eso estaba cuando entró alguien. Suspiré y le miré de reojo. Sin decir nada se puso a mi lado y se la sacó. La tenía morcillona el muy cabrón. Miró de reojo hacia mi polla y me soltó...-Te la he puesto dura...-Sobrado... –le respondí desafiante. Algo me decía que me seguiría hasta los baños. Sin decirme nada, me cogió la mano libre y me la colocó en su polla. Noté como se fue poniendo dura hasta alcanzar su máximo esplendor-. Y yo a ti...-Pues vas a tener que hacer algo, putito...Odiaba que me llamase putito, y él lo sabía, por eso lo decía aún más, porque sabía que doblegaba mi voluntad. Liberó mi mano, aunque yo no solté su rabo, y me empujó con las dos manos para que me agachase delante de él. No opuse apenas resistencia, me moría de ganas. Con su rabo tieso zarandeándose a pocos centímetros de mi boca, poco importaba que pudiera entrar ...