MI HISTORIA MILITAR GAY
Fecha: 18/12/2018,
Categorías:
Gays
Autor: pedrinchi1111, Fuente: SexoSinTabues
... detrás, entrelazamos las manos. Así dormimos esa noche, abrazados, cansados y satisfechos. El ruido de la lluvia nos arrulló. Al dia siguiente me despierto y él está haciendo el desayuno, me sirve muy serio y empezamos a comer en silencio. Pensé que estaba molesto conmigo pero me mira, me sonríe y me dice: “Entonces, ¿te gustó?”. Yo me relaje, le sonreí y le dije: “Me encantó”. Se me acerca y me da un beso. Se levanta, se baja el bóxer, se saca la verga y me dice: “Es tuya pero necesita cuidados, que la atiendas, que la cuides, puedes tenerla todas las veces que quieras” mientras me picaba el ojo. “Acepto, la tienes gigante papi” dije gustoso y me volvió a dar otro beso, más intenso, al mismo tiempo que recorría con sus manos mi cuerpo y llega a mi culo. “Me encanta tu culo y solo quiero hundirte la verga todas las veces que quiera”. “Es todo tuyo, tu solo pídelo” Y empezamos a culear en la mesa, esta vez de perrito. Yo me apoye en la mesa y el me culió tan delicioso que se vino nuevamente adentro de mi culo. “No te vas a deshacer de mi” me decía en medio de la faena, “Nunca” respondí. ...
... Pasamos 10 meses juntos, y fueron de lo mejor, ese hombre era insaciable, culiabamos todo el tiempo, de mañana, de tarde, de noche, en la cama, el piso, en la mesa, contra la pared, en la cocina, en una silla, en fin, de todas las formas habidas que teníamos a la mano. Llegaba y me abrazaba por detrás y a veces me decía “papi vamos a echar la culiada”, otras veces solo llegaba y de una me ponía a chupar. Yo nunca le decía que no. A veces era yo quien me bajaba el pantalón y le decía: “Papi, no quieres culito”. Enseguida se paraba y me hacía beso negro para después culiarme. Dormimos juntos todo el tiempo en su cuarto, yo apoyado en su gran pecho que tocaba, besaba, era mío, todo mío. Su verga, su cuerpo, fue todo mío. Cuando termine mi servicio militar me quede con él unos dias mas, ya en mi ciudad prometí visitarlo y lo hacía cada vez que podía. Hablábamos mucho por teléfono y nuestra relación siguió un largo tiempo pero término por cosas que no vienen al caso. A veces viene a mi ciudad y me escribe y salimos, usualmente terminamos en algún hotel reviviendo esos maravillosos tiempos.