EDUARD, MI JOVEN AMANTE
Fecha: 18/10/2017,
Categorías:
Gays
Autor: popito, Fuente: RelatosEróticos
EDUARD, MI JOVEN AMANTE Soy un hombre de 43 años, aunque físicamente aparento 35 años. Soy muy deportista. Entreno 3 horas diarias y he sido atleta de competición. Mi cuerpo es puro músculo y fibra. Voy depilado por todo el cuerpo. Solo en la cabeza tengo pelo, aunque lo llevo muy cortito. Soy de piel morena, y en verano, parezco mulato. Me gustaría relatar una fantasía en honor a un amigo al que he prometido dedicarle este relato. Mi amigo, se llama Eduard. Tiene 15 años. Le conocí a través de un mail que me envió hace ya más de un año, en el que me aportaba una crítica positiva a un relato que publiqué en una página de relatos eróticos de internet. Estuvimos intercambiando mails en un principio. Luego hablamos por Skype y finalmente por whatsapp. Congeniamos muy bien en gustos y aspectos personales. Me demostró una gran madurez en muchos temas. Nos intercambiamos fotos de nuestras caras, de nuestros cuerpos y de nuestras piernas. Eduard, es un chico delgado, pero fibrado. Sin vello en su torso. Tiene dos tetillas como botones de corchete, chiquititas pero muy bien puestas en un tórax aún sin desarrollar. Su abdomen es duro, plano y con sus músculos abdominales muy marcados. Su cara es imberbe, de adolescente. Con rasgos occidentales. Ojos negros, mandíbula bien dibujada, nariz perfilada y labios carnosos, simétricos, rositas y muy brillantes�en definitiva�un chico guapísimo. Sus piernas, son delgadas pero bien definidas. Con abundante vello y sus gemelos en desarrollo ...
... pero muy moldeados por su afición al ciclismo. Mantuvimos conversaciones hasta altas horas de la madrugada, en las que comentábamos muchos temas�y poco a poco�fuimos cogiéndonos cariño. Recuerdo que le pasé algún otro relato que tenía escrito y lo disfrutó de manera soberana: ¡se hizo tres pajas del tirón! Jajaja. En alguna ocasión, me comentó que estaba empezando a ver una serie gay llamada Queer as folk y que me recomendó encarecidamente. Decía que había unos protagonistas que le recordaban a nosotros dos: un hombre más maduro que mantenía sexo con un menor de 17 años. Tras mucha insistencia, accedí a ver la serie. En verdad, era apasionante la serie. Ambos nos enganchamos y tras ver un capítulo, comentábamos después nuestras opiniones,� En alguna ocasión�ambos�estábamos tan calientes después de ver la serie�que mientras hablábamos�cada uno frente a su ordenador�.no podíamos evitar tocarnos nuestros miembros erectos y lubricados por líquido preseminal. Eduard vive en Barcelona y yo en Madrid. En una conversación que mantuvimos una noche a través de skype�no pudimos evitar�masturbarnos en la distancia�pero disfrutando como si estuviéramos enfrente uno del otro�porque las frases que escribíamos en nuestros respectivos ordenadores nos unían hasta el punto de parecer que estábamos realmente juntos���: - Eduard � Le dije yo, mientras le miraba a los ojos - Tenía muchas ganas de tenerte delante de mí�.así�como ahora� y poderte hablar directamente, escuchar el timbre de tu voz ...