La Historia de Lena (Parte 2)
Fecha: 30/12/2018,
Categorías:
Humor sexual
Sexo con Maduras
Tabú
Autor: juanmanueltercero, Fuente: xHamster
... con que lo hacía, luego pasaba a jugar con toda la labia que me colgaba en la panocha, tomando entre las yemas de sus dedos todas aquellas carnes, intercambiaba suaves caricias con agarrones fuertes, lo hacía con la presión suficiente para que yo sintiera la fuerza del macho que en ese momento era dueño de mis intimidades…El tal Pedro era todo un experto en conquistarme y poseerme…Imposible negarle lo que se le antojara…Sin embargo, cuando tocaba todas las mojazones que tenía en mis abajos, haciéndose el serio, reclamaba, ¡¡ajá!! Aquí ya estuvo alguien…Sí mi rey, el cuarto del Hugo es el primero que encuentro en mi camino…Pero ¿sabes una cosa? Hoy solo pajas hubo por esos lados… Para ti tengo algo más…Enseguida me arrodillaba frente a él que estaba sentado, yo quedaba casi debajo del escritorio… con malicia y premura, le abría el pantalón y le sacaba el pito que ya tenía erecto… yo alucinaba con aquella verga gorda y cabezona… iniciaba una mamada con todas la de ley… Aquello incluía los huevos.Cuando todo el grueso mástil ya estaba totalmente cubierto de mis babas, él ya estaba de camino al cielo… rápidamente me levantaba y dándole la espalda me sentaba a horcajadas en sus piernas…Yo misma, poco a poco, pero con una ansiedad loca, me empalaba el culo…Imposible olvidar la sensación en la entrada de mi ano cuando esa punta de carne joven, dura, caliente y mojada se asomaba y poco a poco horadaba el pequeño agujero… sentía que me partía la vida… el intruso no perdonaba el ...
... estrechísimo camino, como que más le excitaba esa natural condición… Hasta que vencía la resistencia… y cual explosión espacial en mis entrañas, la cabezota irreverente, grande y grosera, se metía en la parte baja de mis intestinos… aquello era doloroso, quemante, totalmente procaz y perverso…Pero simultáneamente me sentía totalmente llena, poseída, incapaz de defenderme… Lenta y automáticamente aparecía un gustillo adictivo por todo eso…Tan real, que mis entrañas se adaptaban al monstruo intruso…Poco a poco empezaba a mover en círculos mi cintura y el trasero, el movimiento de una batidora… el tronco carnoso en el que estaba sentada rebotaba suavemente por todas las paredes, pliegues y partes de mi aparato defecador… sentía rico en mis entrañas y morbo en mi mente…Aquello me gustaba mucho… subía las revoluciones del batido y el placer se intensificaba…El dichoso dueño del trono en el que estaba ensartada también gozaba, la posición en que estábamos le permitía sobar a placer y sin restricción mis nalgas, las cuales por su generoso tamaño, rebalsaban la parte púbica de él.El agasajo que se daba con mis nalgas, lo intercalaba con aprovechar mis tetas, las acariciaba, las sopesaba, las amasaba, jugaba con los pezones: sobarlos con la palma de sus manos y en seguida pellizcarlos le garantizaba mi calentura y gratitud…Por momentos besaba, lamía y succionaba mi cuello… imposible aguantar mucho tiempo tanta excitación… yo dejaba el batido y empezaba un sube y baja rápido y violento… ese ...