Memorias de un esclavo (6): Cos dos hombres conoci - Relatos Eróticos

Memorias de un esclavo (6): Cos dos hombres conoci

... justo cuando los dos sacaron sus pollas de dentro de mi cuerpo.Volvimos a beber y a fumar un cigarrillo, a mi me habian puesto de pie de espaldas a ellos sentados juntos al borde de la cama, y no paraban de apretarme las nalgas, se separarlas, de meterme los dedos por el ano que luego me daban a chupar, hasta ellos se levantaron, se quedaron de pie, juntos, de espaldas a mi y me hicieron ponerme de rodillas detras de ellos, me cogieron las manos y cada uno puso una de mis manos en sus pollas y moverlas, mientras que a la vez me hacian besarles y chuparles los culos metiendo mi lengua entre sus nalgas que se abrian ellos mismos.Eso les volvió locos, me pusieron otra vez a cuatro patas con furia, con mi culo en pompa, casi violentamente, y me empezaron a follar pero pegandome en las nalgas, se iban turnando, sacaba uno su polla y ya me la estaba metiendo el otro, ya no pensaban en mi, solo en ellos, y como a****les me empujaban a golpes de polla hasta correrse los dos dentro de mi culo.Al sacar su polla me la metian en la boca y se la limpiaba, tambien entonces me estaba yo masturbando, pero sentándose encima de mi cara, y no sé el culo de cual de los dos estaba chupando y noté una lengua que recorría ...

... mi vientre, mi miembro, mis ingles y mis testiculos lamiendo y recogiendo mi leche, yo notaba manos por todas partes, sobándome, y alguien me levantó las piernas bien separadas y se puso a sobarme el culo, a meter sus dedos dentro, me hacia daño, y luego ya fueron los dos que me metian dedos a la vez, les excitaba mi sumisión, miraban mi cara casi de espanto cuando se pusieron a masturbarme apretando mucho mi pene, acariciandome los testiculos, pellizcándome las nalgas, dándome azotes con la palma de sus manos, hasta que me corrí por en sus manos que tuve que limpiar tragándome mi propio semen.Ya no hicimos nada más, pero en el rato que estuvimos fumando y bebiendo antes de despedirnos, ellos desnudos todavia, a mí me habian puesto las bragas, ellos hablaban de sus cosas mientras que a mi me tenian turnándome chupándoles el pene una y otra vez alternativamente, y ellos alargando sus manos para tocarme las nalgas continuamente, y acariciando con sus dedos al pasar por mi ano, se habian vaciado conmigo, pero a ellos les gustó despedirnos así, a mi tambien, y nos dijimos adios dandonos un beso con lengua los tres, pero en cuanto llegué a mi casa me corrí otra vez de tanto que me habian calentado el culo.