1. Entregando a Lorena 36


    Fecha: 14/01/2019, Categorías: Anal Sexo con Maduras Voyerismo Autor: aristurman, Fuente: xHamster

    ... pibe tenía los ojos cerrados y suspiraba suavemente, mientras mi esposa jugaba con eso que pronto iba a estar metido en el fondo de su caliente vagina.De repente el chico tomó la cabeza de mi esposa entre sus manos, diciéndole que ya no aguantaba más; de seguir así, iría a acabar en pocos segundos más.Ella pareció despertar de un sueño. Lo miró y se incorporó. Se apoyó contra el respaldo del sillón y levantó su breve vestido, mostrándole al chico su redondo culo, apenas cubierto por una diminuta tanga de seda negra…Tiago sacó un forro de su bolsillo y enseguida se lo calzó en su enorme verga, sin dejar de mirar extasiado el trasero que le ofrecía mi esposa.Lorena giró su cabeza para mirarme y se mordió un labio, mostrándome su expresión de calentura y ansiedad mientras esperaba que el pibe tomara su lugar detrás de ella.Por fin Tiago se acercó, pero en vez de penetrarla, comenzó a jugar con Lorena, rozando con la punta de su verga la tanga ahora empapada.Ella se volvió para mirarlo, suplicándole ya con desesperación;“No me hagas desear más, nene… cogeme de una buena vez por favor…”Lo vi sonreír maliciosamente, mientras le corría la tanga a un lado y se la iba metiendo de a poco, hasta el fondo, despacio pero sin pausa.Mi mujer gimió bastante, sintiendo esa poderosa verga abrirse paso en su vagina. Desde donde estaba, podía ver sus labios externos envolviendo esa tremenda verga dura, apretándola para no dejarla escapar.Tiago la aferró por la cintura y comenzó a bombearla con ...
    ... más ritmo, mientras ella empezaba a jadear y a gemir con más ganas…“Me encanta la concha de tu mujer, flaco…” Me dijo mirándome.Ella no decía nada, pero cada vez gemía más y más, mientras el pibe arremetía con toda la potencia posible, en un duro mete y saca…En ese momento sentí que mi propia verga no resistía más el encierro. Tiago me sonrió, diciéndome que me pajeara tranquilo, mientras él se cogía a mi mujercita.Lorena giró la cabeza para mirar cómo yo me hacía la paja.Largó una carcajada y le dijo al chico;“A mi marido le encanta ver cómo me cogen otros machos…”Mientras yo me masturbaba, el pibe la tomó por los cabellos y le tiró la cabeza hacia atrás, para comerle los labios en un beso profundo, sin dejar de arremeterle la concha con su tremenda pija.Lorena gemía y aullaba de placer; cada tanto alguna embestida más violenta la hacía gemir de dolor también.Por mi parte, sintiendo que estaba por acabar, me levanté para dirigirme a la cocina. Desde allí pude distinguir claramente que Lorena alcanzaba su primer orgasmo; no me quedaba ninguna duda, por la manera en que aulló como una posesa y a todo pulmón.Al regresar pude ver que todavía el pibe la estaba bombeando, pero me pareció ver que algo había cambiado…La cara de mi mujercita estaba transfigurada, pero no tanto por placer, sino que parecía estar gimiendo de dolor.Entonces me di cuenta, de que ese pendejo hijo de puta, luego de hacerla acabar, ahora le había metido su verga por el culo a mi delicada esposa.La estaba ...