1. El señor Manuel (I)


    Fecha: 20/10/2017, Categorías: Sexo con Maduras Voyerismo Autor: dbeni72, Fuente: xHamster

    Hoy voy a contar la historia del señor Manuel, un vecino jubilado al que le tenemos mucho cariño desde hace años mi marido y yo.No es que yo sea una niña con mis cincuenta años, pero el señor Manuel nos saca más de veinticinco años, y desde que vinimos a vivir a su edificio, siempre nos ha tratado de una manera muy fraternal. Su mujer está enferma hace varios años, perdió la cabeza y está casi todo el día en casa en una cama o en la silla de ruedas, menos cuando la lleva en su silla de ruedas a la calle, donde la recoge un microbús de un centro de día para personas mayores, y así él desconecta un poco y puede hacer compras o darse un paseo. Es maravilloso el cariño con el que la trata.Hace cosa de dos años el señor Manuel se hizo daño en una muñeca, y mi marido y yo le echábamos una mano a subirla y bajarla a la silla de ruedas, y le acompañábamos uno de los dos a darla un paseo o llevársela al autobús, ya que el no podía agarrar la silla con su mano izquierda (por suerte fue una lesión leve, y en menos de un mes estaba casi recuperado). Esos días entablamos aún más amistad con él, y no hacía más que tener detalles con nosotros. A mí me regalaba flores, y a mi marido le regaló unas botellas de orujo que él preparaba, y, aunque no bebemos ninguno de los dos, se las tuvimos que aceptar para que se sintiera mejor.A los pocos días de estar recuperado, le encontré en el portal. El señor Manuel acababa de dejar a su mujer en el autobús, y le conté que la cisterna de uno de los ...
    ... baños no nos funcionaba bien, ya que él había sido fontanero. Así que se ofreció a mirárnosla. Le dije que se pasara a media mañana, que tenía que ir a comprar en ese momento.Me olvidé de que tenía que venir el señor Manuel, y yo en casa suelo estar con un vestido de botones viejo, y no llevo sujetador debajo. Así que me puse cómoda, como siempre. A eso de las 12 y cuarto sonó el timbre, y me acordé que iba a venir en ese momento. Y al mirar por la mirilla, vi que era él. Le abrí la puerta y me dijo que a ver qué le pasaba a la cisterna del baño. Me pidió un destornillador para quitar un tornillo q impedía quitar la tapa de la cisterna y fui a por la caja de herramientas. Y al dejarla en el suelo y mirar agachada, no me di cuenta que se me habían abierto dos botones del vestido. El señor Manuel, que estaba frente a mí, se puso algo nervioso, y le noté raro, sin darme cuenta el motivo. Se me debía haber abierto bastante el vestido, y desde donde estaba él, me debía haber visto parte de los pechos por el amplio escote. Alguna temporada he hecho dieta, pero mi tendencia es a engordar un poquito, pero los pechos los tengo grandecitos y muy bonitos, aunque esté mal que lo diga yo.Cuando me incorporé para darle el destornillador, le vi colorado de vergüenza. Y cogió el destornillador de mi mano mirando hacia un lado. Y yo sin darme cuenta que el escote, al estar de pie, era bastante amplio, y se veía más que un canalillo, más bien dos trozos de pecho sin llegar a verse los pezones.En ...
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