El terceto se convierte en cuarteto
Fecha: 27/01/2019,
Categorías:
Anal
Sexo en Grupo
Sexo con Maduras
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... venía provisto de un pene de látex de una dimensión considerable, junto con un pote de gel lubricante. Se acercó a Anita, lamiéndole las tetas y metiéndole un par de dedos en la concha, para sacarlos enseguida mojados con los jugos de mi caliente esposa.Luego le apoyó su verga un poco más erecta entre las nalgas y le colocó el arnés en la cintura, ajustando las cintas y lubricando el pene artificial con el gel.Ricardo mientras tanto calladamente fumaba en un rincón, presenciando todo con una mirada divertida, mientras despacio se masajeaba su enorme verga.Tamara me pidió que me pusiera en cuatro patas en la cama, para que mi mujercita pudiera penetrarme con ese pene de látex. Me aseguró que eso ayudaría para que después pudiera sodomizarme ella con su pija gigante, sin desgarrarme.Yo no estaba muy convencido de perder mi virginidad anal de esta manera, pero la mirada lujuriosa de Anita me excitó de una manera increíble y entonces hice lo que Tamara pedía. Pude notar que mi esposa se acomodaba de rodillas a mi espalda y luego sentí que me penetraba muy despacio con ese pedazo de látex.Giré mi cabeza para mirar a mi esposa; que estaba excitadísima mirando como el pene artificial se perdía dentro de mi culo. Pude sentir que pasaba mi esfínter y finalmente se detuvo cuando me lo metió por completo hasta el fondo de mi hasta ahora estrecho ano.Me ardía intensamente, pero a la vez me provocaba mucho placer y casi ningún dolor. Muy suavemente Anita comenzó a moverse hacia ...
... adelante y atrás, sin sacármelo por completo de mi ano: cada vez que entraba, me sentía invadido por una ola de placer, que se manifestaba en un calor intenso y un ardor increíble.“Ahora ya ves, mi amor, lo que se siente cuando te la meten por el culo” me dijo.Mi mujercita sonreía mientras se balanceaba penetrándome. Tamara la dirigía, pero repentinamente se acostó boca arriba por debajo de mi cuerpo, tomando mi verga dentro de sus labios, dándome una mamada colosal, agregando más placer todavía a la penetración que me daba Anita.Mientras me la estaba chupando, separó sus piernas y me pidió que me dedicara a su verga, que estaba al alcance de mi boca. Dudé por un momento, pero enseguida la tomé entre mis labios y comencé a lamerla casi con desesperación.Ricardo se reía mientras continuaba masajeándose la verga.“Así que resultaste flor de puto, Flaco, te están rompiendo el culo y te estás comiendo otra poronga monstruosa al mismo tiempo”Yo ni siquiera pude responderle, la excitación que me producía la combinación de la sodomía y la fellatio era demasiado intensa, me sentía un poco mareado, casi afiebrado por tanta calentura.Unos pocos segundos después vacié toda mi leche en la garganta de Tamara.Ella se incorporó mientras tragaba todo, besándome con la boca abierta, haciéndome sentir el sabor de mi propio semen. Luego se arrodilló detrás de Anita, lubricándole el culo con el gel, para penetrarla de un solo saque. Mi mujercita dejó escapar un aullido de dolor y placer al sentir esa ...