1. Mi hermano me llamo de la cárcel, lo iban a matar -2


    Fecha: 21/10/2017, Categorías: Infidelidad Autor: sandra garcia, Fuente: CuentoRelatos

    ... apretada di di ta ah ah ah ah ah... No entendía lo que me decía todo me daba vueltas y nuevamente el fuego del orgasmo invadió todo mi cuerpo, cuando regrese el seguía con el mete y saca, que diferencia de mi esposo que no duraba ni un minuto, de repente sin sacarla de mi bajo mis piernas y sentí todo su cuerpo peludo encima mío, tenía su cara frente a la mía, y sus ojos me miraban, sin pensarlo comenzamos a besarnos como locos, nuestras lenguas se cruzaban, y mis piernas sin que me diera cuenta se atenazaron a su espalda como para no dejar que salga esa verga de mí. - no no no me la saques, más mas, papi, no la saques, más maaaaa... Me volvía loca todos sus pelos que se frotaban con mi cuerpo, sobre todo sobre mis pezones, me volvía loca el frote de arriba abajo. - ah ah ah, creo que me vengo, te voy a dejar un recuerdo putita, te voy a preñar, ah ah ah, aaaaaaaaaaa... Entonces se puso rígido y me abrazo tanto que no podía respirar, entonces sentí como esa maza de carne, vertía un líquido caliente dentro de mí, mis piernas se abrazaron con toda su fuerza para que todo quedara en mí, sentí dos chorros más, paso un minuto y sentí ...
    ... como esa serpiente se reducía y se ponía fláccida saliendo de mí, el rodo y se tiro en la alfombra respirando como un chancho satisfecho, pero yo quería más, y me acerque y viendo la verga flácida y mojada, sentí que debía agradecerle todo el placer que me había dado y sin más agarrándola con las dos manos, la comencé a lamer sintiendo la mezcla de su semen con mis fluidos ,era un sabor entre salado y dulce, siempre que me habían hablado mis amigas había sentido asco, pero ahora era un manjar para mí y comencé a chuparla y tragarme todos esos líquidos, es olor a orines me excitaba mas, después me puse a lamer sus bolas peluda. - puta que rica lengüita tienes eres golosa como María, eres una buena hija y vas a salvar a tu hermano, ah ah ah chupa chúpatelo todito ah ah... -Yo me sentía como drogada. Entonces él se levantó y me miro -vístete y vete, yo me encargare de todo para que trasladen a tu hermano, no te preocupes, mañana te llamo. Me cambie rápidamente, no dije una palabra más, salí tome un taxi y me fui a mi casa. La mujer había entrado a esa oficina ya no era la misma que la que ahora salía oliendo a semen de un abogado. 
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