Tiempo de Confesiones. Continuación de "José mi profesor de deportes 2" - Relatos Eróticos

Tiempo de Confesiones. Continuación de "José mi profesor de deportes 2"

... poco esas lamidas a mis tetillas. "Solo dejate llevar" fueron sus palabras, con su voz ronca, dicho en mi oido, su labios se posaron sobre los míos y esa serie de besos, su lengua dominando a la mía guiandola, mis manos acariciando su espalda y mis piernas se enlazaron a su pelvis y asi pasamos un rato en esa rica sesión de besos Nos quitamos los pantalones y los boxers, ese calor de nuestros cuerpos desnudos ese día se harían uno solo. Se volteo y quedamos en un 69, mi lengua desesperada lamia su verga, oliendola, chupandola dedicandole todo mi amor a cada parte de ella. Él con su lengua matandome de placer, con unas cuantas lamidas me hacía correrme y al poco mientras me tragaba todo su miembro, sentí como me corría y solo su verga tapaba mis gemidos de hembra en celo para él. Jadeando quite su verga de mi boca y recuperaba aliento, se quito de encima y me volteo, ya sabía que cuando me corría me hacía un muñequito de trapo que podía manejar de su antojo, de espaldas Me puso con las pompas para arriba, y separo con sus manos mi culo, le dio una lamida y llevo dos dedos a mi interior unos cuantos movimientos circulares, algo de lubricante y me levanto un poco la cola clavandome por completo y yo respondiendo con suaves gemidos. Sus movimientos eran lentos y profundos, ese día lo llevaba con calma, no había prisas solo él y yo. Yo estaba a su merced, cosa que le fascinaba, me sentia feliz con cada clavada, sus manos se paseaban por mi espalda, me dio la vuelta y siguio ...

... penetrandome, mirandonos a los ojos, viendo mi cara desencajada por el placer, tenía mis ojos entrecerrados. Nuestros gemidos, era más que perfecto. Vi su mirada de deseo, sus manos en mis caderas, me saco su verga, y me tomo de la mano, al comedor, me sente en la mesa, algo fría y la piel se me puso de gallina, "hoy eres mi almuerzo, te comeré hasta hartarme" fueron sus palabras. Me levanto y me dio vuelta, en la punta de la mesa, mi cuerpo se recostaba de pie dandole la espalda mi culo queda expuesto para él. Paso su verga por mi ano jugando y me la metio de una. Arrancandome un fuerte gemido. Sus manos tomaron mis brazos jalandolos un poquito para atrás. Me estaba cogiendo con fuerza otra vez, sentir sus guebos chocando con mi culo, ese sonido, me excitaba volteaba de vez en cuando para ver su mirada, sus respiración, solto mis brazos y sus manos abrazaron mi abdomen ahi bajo el ritmo dejandola unos segunditos dentro y volviendola a mover me volvía loco eso. Se salio y me cargo con sus fuertes brazos tirandome en el sofá donde empezamos esa mañana, y volvio a metermela ahora si con toda su fuerza, su boca furiosa besaba la mía, dominandome y haciendo gemir sin poder controlarme saco su verga y comenzo a masturbarse rápidamente y salieron volando chorros de su leche caliente, en mi pecho y mi abdomen fueron a parar Un momento se quedo quieto como yo, reponiendo energías salio de la sala y regreso con su celular, así como estaba me tomo varias fotos, ambos sumamente satisfechos. ...