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Aposté a mi novia... y perdí... pero gané
Fecha: 02/02/2019, Categorías: Voyerismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... ella cedía y terminaba de rodillas tragándose el tabaco del tipo. Le di dos opciones más de chicas que sabía eran imposibles. Una era casada y la otra era re-tímida. Las tres (incluida mi nena) eran esculturales, de tetas grandes, cabellos largos, piernas y culos de ensueño. Bueno él acepto y se fue al ataque. Desde lejos empecé a observar cómo las estaba atacando al tiempo. Las sacaba a bailar, les ofrecía cigarros, licor, de todo. Las trataba con amabilidad pero también con mucho sexo, pues no dejaba espacio para tocarlas o rozarlas sobre sus senos o cuerpos. Las tres parecían no notarlo y entre más pasaba el tiempo más se veían los cuatro más juntitos y animosos. De un momento a otro el tipo salió del lugar con la casada. Se me perdió pero logré verlos que caminaban hacía afuera de la fiesta, al fondo de un jardín. Pedro la encimó de una y la estaba besando a fondo además de tocarla por todas partes. Ella se dejaba como si estuviera con su esposo. Él le tomó una mano y la llevó hasta su pene sobre el pantalón y ella no corta ni perezosa lo empezó a sobar. Creo que se lo sacó y todo y comenzó a masturbarlo. Ella miraba hacia la fiesta para saber si la estaban mirando y Pedro la empujó un poco hacía el lado más oscuro del jardín y la hizo agacharse. Nadia (la casada) comenzó a tragarse el tabaco de Pedro que le acariciaba el cabello mientras movía la cintura como si le follara la boca. La verdad Pedro era un experto porque no había pasado ni una hora y ya la tenía a tiro ...
... para regarle la cara de semen. Lo estaba disfrutando mucho, y yo también, porque la Nadia esta es una rubia escultural que llevaba un vestidito en minifalda estupendo. Su garganta alojaba la polla grande de Pedro cuando alguien entró en el jardín. Ambos se quedaron petrificados pero ya no había nada que hacer se trataba de mi nena que los pilló en fragancia. Ella pronto entró a la fiesta y los dos amantes del momento se arreglaron y fueron tras de ella. Yo sabía que ella no caía. Y me preparaba a recibir mis billetes después de que se armara el alboroto. Entré a la fiesta tras Pedro y Nadia. Ella fue hasta donde mi novia y empezó a explicarle, mientras Pedro fue donde un par de amigos de él; que no había visto antes; y hablaba sonriente con ellos. La cosa fue que Nadia y mi nena empezaron a reírse, y Pedro se les acercó. Vi en los ojos de mi novia un brillo extraño al empezar a hablar con el tipo este. Ella misma lo sacó a bailar, mientras los dos amigos de Pedro se acercaban a charlar con Nadia y con Susana (la tímida) . Pasó un buen rato y Pedro ya estaba atacando a Susana. Parecía extraño pero ya también se le veían los ojitos idos por el Pedro este. 10 minutos después Pedro subía al segundo piso con Susana sin que nadie se diera cuenta. Cuando yo iba a subir para seguirlo vi cómo Nadia y mi nena se hacían las tontas para no notarse mientras subían también. Las seguí hasta uno de los cuartos de la gran casa de la fiesta. Intenté buscar una forma de ver o escuchar. Di vueltas ...