Anita enfiestada otra vez por sus compañeros
Fecha: 20/02/2019,
Categorías:
Anal
Sexo con Maduras
Voyerismo
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... aquélla noche de cumpleaños…Esta vez Ana me dijo que yo viajara adelante, para conversar con Rudy. Ella iría en el asiento trasero, con Fernando…A poco de iniciar el viaje, me pareció oír unos leves gemidos provenientes del asiento trasero. No me animé a girar directamente mi cabeza para averiguar qué estaba pasando, pero Rudy sonrió levemente mientras miraba por el espejo retrovisor. Supe entonces que, con esa complicidad en las miradas; ese otro turro de Fernando estaba haciendo gemir a Anita…Cuando estábamos por llegar, Ana les agradeció el viaje y les ofreció quedarse para compartir un último trago con nosotros en casa. Ambos aceptaron encantados. Entonces imaginé que la intención de esos dos tipos era cogerse a mi esposa; aunque yo estuviera allí presente…Apenas entramos a casa, Anita puso música y atenuó un poco las luces.Después de varias copas, todos estábamos bastante distendidos.En un momento les pregunté si habían enfiestado entre los dos a alguna mujer. Ambos abrieron los ojos y miraron sin disimulo a Anita; pero enseguida aclararon casi al unísono que jamás lo habían hecho…Entonces habló Anita, dejándonos mudos a los tres hombres:“Ustedes dos podrían enfiestarme a mí… A Víctor le gusta mirar…”Yo no dije nada; me serví otra bebida, esperando la reacción de ellos dos.Pero los dos pibes seguían callados, todavía asimilando lo que había dicho mi sensual esposa. Ambos estarían seguros de que ella nunca se había enterado cómo le habían dejado el culo lleno de semen ...
... entre los dos.Pero se equivocaban: hasta yo mismo lo sabía…Anita decidió arrancar el juego. Se puso de pie y empezó a deslizar su vestido largo por las caderas, hasta dejarlo arrebujado en el piso. Quedó vestida solamente con un par de zapatos de taco aguja…Se acercó a Fernando y lo hizo poner de pie. Luego comenzó ella a refregar su cuerpo contra el de él. Por supuesto, Fer no se quejó y me miró a los ojos buscando mi aprobación. Con un leve gesto de mi parte, el tipo comenzó entonces a franelear a mi esposa, atrayéndola contra su cuerpo, apoyando el trasero de ella contra su ya endurecida verga dentro de sus pantalones…En un momento ella se dio vuelta y se agachó frente a Fer, para bajarle los pantalones hasta los tobillos. Luego Ana se recostó sobre el sillón, abrió sus piernas y esperó por su amigo, diciéndole que era toda suya…El flaco no demoró ni un segundo en zambullirse entre los muslos abiertos de mi esposa, metiendo su lengua hasta el fondo de esa concha mojada.Ella cerró los ojos y comenzó a suspirar suavemente.De repente Fernando la hizo girar, poniéndola en cuatro. Se sentó en el lugar de mi esposa y le ordenó que le lamiera la pija. Cuando ella empezó a hacerlo, su redondo culo quedó disponible para Rudy, que no dudó en acercarse.Se ubicó detrás de ella y le pasó la punta de su verga erecta entre sus redondos cachetes, abriéndoselos con ambas manos. Cuando justo estaba por penetrarle la concha, Ana les dijo a ambos que ahora era el turno de su esposo… Me miró a mi ...