Cinco para una y por atrás - Relatos Eróticos

Cinco para una y por atrás

Todo empezó como cualquier otro fin de semana con mi chica, teníamos recién 4 meses de conocernos y exactamente lo mismo de haber iniciado nuestro noviazgo, pues el día que la conocí fue el día en que le dije que si quería ser mi novia, me decidí así de rápido por ella puesto que en ese momento estaba buscando la mujer más zorra y más puta que pudiera encontrar, el día que la conocí follamos tan duro, mamo tan rico y me dio su dulce culo sin siquiera saber mi nombre que me dije esta tiene que ser mía. Linda del rostro, dulce más joven que yo, ella 21 y yo 29, una carita de inocente, un hermoso par pechos con pezón café claro y redondas y grandes nalgas con unas piernas a la par de lo demás, la verdad no era completamente delgada pero tampoco se podría decir gorda, gordibuena la llamaríamos en mi país y el cabello teñido de rubio. Yo rentaba una casa con un amigo y compañero de trabajo, era una casa chica pero para nosotros estaba bien por la ubicación, mi compañero me pidió permiso para que su primo y unos amigos que venían de visita a la ciudad se quedaran en la casa una noche a lo cual sin problema accedí, me dijo que irían a una fiesta que si gustaba podía ir a la fiesta, entonces mi maquiavélica y pervertida mente empezó a trazar un plan para ir y hacer algo que a mi chica que llamare Jazmín (nombre falso) nos excitaba mucho, nos encantaba el morbo de exhibirla y tener sexo en lugares públicos, insinuaciones etc., pero hasta ese punto era solo lo que hacíamos, no imagine ...

... que las cosas fueran a llegar a tal grado. Le dije a Jazmín que nos veríamos temprano para ir a comprarle un putivestido para ir a la fiesta así que con todo el morbo del mundo fuimos a las tiendas de ropa más corrientes que conocemos y de ahí tomamos un pequeño vestido muy escotado, muy corto de color azul con negro, le era imposible dar más de 5 pasos sin tener que bajarse el vestido ya que se le subía, adicionalmente a eso ella no usaba ropa interior ni en la parte de arriba ni en la parte de abajo, el vestido era de licra o algo muy similar por lo cual se notaba mucho el mover de sus nalgas y tetas al caminar, y más aún se notaba por la forma del pezón que no llevaba sostén y así nos fuimos a la fiesta, no era la primera ocasión que hacíamos tal juego usualmente provocábamos ese tipo de morbo, eso me mantiene la verga parada desde el momento de salir hasta el último coge de la noche y ella la mantiene mojadisima de igual manera toda la noche. Llegamos a la fiesta y fuimos directo a saludar a mi roomie y compañía, nos divertía sobremanera la forma en la que al pasar todas las miradas se iban directo a su culo y a su escote, de verdad llamaba la atención de todo el mundo, saludamos a mis amigos y nos pusimos a beber, la fiesta era un fiasco, muy aburrida y la mayoría de las personas se empezaron a ir así que decidimos hacer lo mismo. Cuando llegamos a la casa seguimos bebiendo Jazmín se sentó en el sillón y subió sus piernas sobre mi pierna, de tal manera que si estabas de ...