Mi Primera Vez, Parte 4
Fecha: 28/02/2019,
Categorías:
Gays
Autor: carlos.cifuentes280, Fuente: SexoSinTabues
... largo rato, hasta que nuestros meñiques se juntaron (teníamos las manos en la cama). Fue tal y como lo hicimos la primera vez que nos tocamos, unas noches atrás en aquella carpa en el campamento. Mi mano subió por su brazo hasta su mejilla y lo volteé. Nos quedamos frente a frente. En ese momento le di un gran beso, mientras que sentía una corriente recorrer mi cuerpo. Mi pene reaccionó al instante, poniéndose duro como el acero. Christian se dio cuenta, por lo que acercó su mano a mi pene y lo empezó a masajear por encima de la ropa. Yo dejé de besarlo para dejar escapar un “Ah” prolongado, lo cual él tomo como señal para ponerse de pie y posicionarse entre mis piernas. Me quitó las zapatillas y las lanzó hacia atrás. Luego, me desabotonó el pantalón para dejar a la vista mi bóxer azul con rayas negras, el cual se veía abultado por mi prominente erección. Empezó a lamer el cuerpo de mi pene por sobre la tela mientras me quitaba el pantalón y los calcetines. Acto seguido, dejó escapar mi glande por el elástico del bóxer, para luego succionarlo fuertemente. Yo me aferraba fuertemente al cubrecama mientras Christian me sacaba el alma por el pene. Me quitó el bóxer y también lo lanzó hacia atrás, mientras yo me quitaba la chaqueta y quedaba sólo con una polera. Me miró con una cara entre ternura y lujuria, para luego abalanzarse sobre mi sexo. Empezó a lamerme las bolas (que es lejos mi punto más erógeno xD!), mientras que con la izquierda me masturbaba firmemente y con la ...
... derecha hurgaba en mi ano. Era una sensación rara pero placentera (hasta ese momento, nunca había jugado con mi ano), y no me dañaba, ya que su baba escurría desde mis bolas hasta mi ano. Estuvo así un rato hasta que logró meter dos dedos dentro de mí. Me sentía en la gloria, sus dedos se movían hábilmente en mi cavidad anal y su boca se alternaba entre mis bolas y mi pene. Cuando sentía que estaba a punto de eyacular, lo detuve. Era mi turno de hacerlo sentir bien. Me puse de pie frente a él y lo empecé a besar, le quité su chaqueta y su polera y le dejé el torso desnudo, luego me quité mi polera quedando totalmente desnudo. Lo seguí besando mientras apretaba sus pectorales (que eran grandes, si bien tenía grasa y parecían unas pequeñas tetitas, debajo se sentía duro el musculo) y apretaba sus rosadas tetillas. Me lancé a succionar sus tetillas con gran entusiasmo, mientras él se dejaba caer en mi cama. Luego empecé a bajar hasta llegar a su pantalón, el cual desabroché y bajé, para luego quitarle las zapatillas y calcetines, dejándolo sólo con boxers. Los cuales eran verdes claro, pero con una gran mancha de verde más oscuro a la altura de su glande. Estaba tan mojado que cuando me acerqué a lamer su pene por sobre la tela, sentía que su pre semen manaba y no paraba, era casi como si estuviera eyaculando. Liberé su pene de aquella prisión y me lancé a mamar como si no hubiera un mañana. Estuve un par de minutos hasta que eyaculó una gran cantidad de semen, el cual tragué una ...