La Historia de Lena (parte 3, final) - Relatos Eróticos

La Historia de Lena (parte 3, final)

... tolerante contigo. Por ninguna razón esto debe repetirse.Si tanto necesitas tus aventuras, aunque no esté muy de acuerdo, para eso están los cuartos de ustedes…Pedí mil perdones, y desde ese día fui más cuidadosa, ya no me fue posible andar cogiendo con los machos de mi “harem” en cualquier parte de esa querida casa… Bien, ya comprenderán que era el menor de los males.-------------------------------------------------------------------------------------------Para la parte triste de esta historia retomaré la palabra, y no la contará la Lena…Al pasar los años, y como correspondía que sucediera, Lena se casó. Al inicio todo bien, aceptable. Pero al correr el tiempo se hizo evidente que Lena tenía dificultades para quedar embarazada…Los tratamientos que intentaron no funcionaron (les recuerdo que esta historia y la de la Tía Marta sucedieron hace mucho tiempo. Muy lejos del 2016. Los avances médicos no eran iguales a los de hoy).Esa situación complicó la relación con su esposo porque para él, tener hijos era su principal propósito en el matrimonio, incluso en la vida… La opción de la adopción no figuraba para nada en el esquema mental de aquel hombre…Aquello, lamentablemente terminó en divorcio…Con el tiempo la Lena se recuperó, pero no volvió a casarse.Económicamente ella quedó bien.Bueno, como todo en la vida, a nadie le acompañan todas las glorias juntas…-------------------------------------------------------------------------------------------Antes de terminar este relato, ...

... déjenme contarles un par de aventuras más de esta preciosa mujer.En algún momento le pregunté cuál evento recordaba ella como de los más impresionantes de su agitada vida sexual…Alegremente ella relató así. Al correr los años, cada quien, mis dos hermanos y yo, formamos nuestros respectivos hogares… Siempre existió unión y cariño entre nosotros…Era común que para mi cumpleaños ellos me visitaran, cuando lo hacían solos, ya se imaginan en qué terminaba el bendito festejo… diferente cuando los acompañaban sus familias.No recuerdo porqué un determinado año, no nos pusimos de acuerdo, y ni ellos, ni sus gentes aparecieron…Al siguiente año yo me preparé, en mí casa lo celebraría con un “buen amigo” que tenía por aquella época…Por su lado, mis hermanos se pusieron de acuerdo y para resarcirme llegarían solos… Pero como querían que fuera una sorpresa no me avisaron…Obviamente me junté con tres hombres… Antes que la situación se pusiera incómoda, hable con mis hermanos. Como siempre, fue fácil ponernos de acuerdo.Primero que yo decidiera hacerlo con tres… Nunca lo había hecho así. Aquello me parecía genial y apetecible… Ya se imaginan lo húmedos que se pusieron mis calzones.Segundo, que se lo propusiera a mi invitado. Si él aceptaba el trío, le daríamos viaje al asunto. Si él no aceptaba, mis queridos hermanos se retirarían después de comer algo, y el agasajo filial lo haríamos posteriormente…Así de fácil arreglábamos las cosas…Algo extrañado, mi invitado aceptó… para él todo aquello ...