Soy la puta de mi ahijado (VI)
Fecha: 12/03/2019,
Categorías:
Incesto
Sexo con Maduras
Autor: amadecasamari, Fuente: CuentoRelatos
... que me follaran y que lo estuviera deseando. Entonces al no recibir respuesta por mi parte me dijo: “Está bien si no quieres que siga lo dejaré”. Entonces yo ya no pude aguantar más por lo necesitada y caliente que estaba y esta vez con una voz ya normal, más bien alta, le dije: “¡Por favor no pares! ¡No me dejes así!” Nacho al final había conseguido llevarme donde pretendía, yo estaba salidísima y cachondísima perdida, solo deseaba que me follarán. Pero Nacho quería más, quería humillarme ante sus amigos un poco más y me dice: “Quieres que te follemos puta? pues para eso es para lo que te hemos pagado, dímelo ¿quieres que te follemos? Yo entonces ya gritando le digo: “Sí folladme, ya de una puta vez, no puedo más y necesito que me folléis todos, por favor, no me torturéis ya más, folladme de una vez, por favor”. Entonces Nacho dice en voz alta: “¿Habéis oído amigos? La muy guarra, que ante toda la sociedad y hasta ahora va de señora decente, y ahora quiere que nos la follemos” No conforme con los comentarios humillantes que estaba haciendo a sus compañeros de mí, continuó para que yo de nuevo le volviera a suplicar diciéndome otra vez: “Grita que eres una puta, que eres una golfa y una cerda y que quieres tener nuestros rabos dentro de todos los agujeros de ese cuerpo de puta que tienes, dilo si quieres que te follemos”. Yo (al no saber aún que estaba así por los efectos de las pastillas de afrodisiaco que mi ahijado me había suministrado, haciéndome creer que eran para los ...
... nervios) no entendía como estaba o como esos jóvenes habían conseguido ponerme así de excitada. Yo en mi interior luchaba por mantenerme firme y entregarme a ellos sin demostrar excitación y ganas de que me hicieran suya. Pues me tenía que dejar follar y prostituirme, porque mi amante así lo quería que lo hicieran, pero no quería darles el gusto de participar y gozar al hacerlo y sin embargo era lo que quería y necesitaba, ¿Qué me estaba pasando? Yo hasta esa mañana era una mujer decente que solo había pertenecido a mi marido y había tenido el desliz que me había llevado a todo esto con mi ahijado. Estando en estos pensamientos, no sé cómo salieron de mí las siguientes palabras: “¡Soy una cerda y quiero vuestros rabos, vuestras pollas, las quiero dentro de mi SIIIII Y YAAAAA…”” Yo al oírme a mí misma me quedé sorprendida de lo que acababa de decir, al final la excitación y las ganas de mi cuerpo habían podido más que mis sentimientos y mi conciencia. Entonces todos al oír mis palabras suplicándoles que me poseyeran se rieron a carcajadas y Nacho me dijo: “Ahora te voy a follar, te lo has ganado. Pero primero espera que coja y me ponga un condón, hay que hacer las cosas con seguridad, aunque me gustaría más hacértelo a pelo, pero sé que no te gusta y no querrás que así lo haga ¿No?”. Entonces cuando le iba a contestar, se adelantó Raúl y dijo: “No, no hace falta que os coloquéis condón ni protección alguna, os la vais a follar a pelo, sin protección. Ella está sana, pues solo, ...