Internet y sus relaciones IV
Fecha: 21/03/2019,
Categorías:
Anal
BDSM
Sexo Duro
Autor: Escritordebondage, Fuente: xHamster
... también tomas en las que además del trasero se veían las bonitas piernas de Susana, enfundadas en las medias de redecilla y calzadas con las sandalias rojas de su madre.Descargalas en el ordenador y envíamelas –ordenó Darkshadow- ¿Sabes cómo hacerlo?Sí, Amo.Durante diez minutos, Susana esperó pacientemente a que su amiga cumpliese las órdenes de Darkshadow. Finalmente Ruth anunció que había terminado.Esta noche te has portado muy bien, Zorra. Sin duda estás deseando correrte.Así es, Amo. Estoy muy excitada.Creo que es el momento de que Cerda te compense por el placer que le has dado.Un momento –interrumpió Susana- no esperará que yo...¡Escuchame, Cerda! Y escuchame bien porque no voy a volver a repetirlo. Tienes un minuto para pedirle educadamente a Zorra que te permita comerle el coño hasta correrse en tu boca o recibirás cien azotes en cada nalga. Tu eliges.Pero, pero –balbuceó Susana- yo no soy lesbiana...Te quedan cuarenta segundos... treinta... veinte.Está bien, está bien. Lo haré.Pideselo por favor.Humillada hasta lo más profundo de su ser, Susana se dirigió a Ruth.Zorra, por favor, permite que me c*** tu coño hasta hacerte correr.Será un placer, Cerda –respondió su amigaSusana observó cómo Ruth liberaba el liguero y deslizaba sus braguitas por las piernas hasta sacárselas. Después se acercó a ella y le plantó el conejo junto a la cara. Podía oler la excitación de su amiga. Como pudo reprimió el asco que le daba y alargó la lengua hasta rozar la raja. Estaba ...
... húmeda.¡Ooh! –gimió Ruth acercándose más.Susana aventuró su lengua entre los labios y lamió el rosado interior. Su amiga volvió a gemir. El sabor no era muy diferente del que había tenido en la boca durante toda la noche. Decidió que si había que hacerlo, lo mejor era acabarlo cuanto antes y se aplicó en comerle el coño a Ruth tratando de imitar lo que a ella le había gustado tanto.La joven no tardó en gemir abiertamente y en un arrebato de deseo liberó las tetas de Susana y empezó a magrearlas. Tenía los pezones endurecidos, pero en seguida se pusieron duros como piedras. Ruth los estiró delicadamente haciendo gemir a su amiga dentro de su coño. Aquello le excitó tanto que durante los siguientes minutos se concentro en estimular intensamente las tetitas de Susana, consiguiendo que ésta pusiese mucha más pasión y entrega en el cunnilinguus. La estoy poniendo cachonda con el magreo, pensó. Era cierto, los pechos de Susana eran muy sensibles y las atenciones de su amiga la habían vuelto a calentar hasta el punto de hacerla olvidar que lo que se estaba comiendo era un coño. Con los ojos cerrados, lamía, chupaba y gemía en la concha de Ruth y cuando un fuerte tirón en sus pezones le hizo abrir la boca, recibió de lleno la corrida de su amiga.¡Oooooooh! –gimió Ruth, agarrando el pelo de Susana y aplastando su cara contra su coño - ¡Lameme, Cerda, lameme!Susana no podía hacer otra cosa que mover la lengua dentro del chocho de su amiga y tragar como podía los líquidos que resbalaban dentro de ...