Tarde de yoga y piscina - Relatos Eróticos

Tarde de yoga y piscina

Como ya les he contado, mi follo a mi cuñada cada vez que podemos, ella es muy buena hermana y tía por lo que nadie sospecharía de ella. Cada vez más puta se pone, como recobrando el tiempo perdido siendo virgen, la sorprendí varias veces masturbando que cosas más insólitas, frutas, verduras, hasta juguetes de mis hijos, la muy puta, siempre que la sorprendía en estas andanzas, me ponía a mil. La beneficiada era mi esposa, que la chuleaba hora todos los días, con las tremendas erecciones que me provocaba mi cuñadita. Un día tomamos la decisión de construir una piscina en nuestro patio trasero, así que llamamos a una empresa especializada para que nos realizara una cotización, así fue, llegamos a acuerdo en el valor y en el plazo de la construcción. Al paso de unas semanas llegaron los maestros con sus herramientas y materiales de construcción. Ellos comenzaron rápidamente, con el fin de cumplir con los plazos establecidos. Un día por temas de salud, nuestra empleada no asistió al trabajo, así que mi cuñada decidió no ir a trabajar y cuidar a los niños, y velar por el trabajo que se estaba realizando. La agradecimos su atención para con nuestro hijos nos despedimos y nos fuimos a nuestros trabajos. Así transcurrió el día de ella, en el cuidado de los niños y atención a los maestros. Como es de costumbre, ella practico yoga, cuando los niños dormían, y como es habitual, lo hizo con poca ropa, en el living de nuestra casa, no sé si por calentura y por ingenuidad, no se ...

... percató que 3 de los maestros la observaban por una de las ventanas. Yo veo esto en mi celular a través de las cámaras de seguridad que tenemos en la casa. Se veía que platicaban entre ellos y se notaba lo excitado que estaba. Esto me puso a mil, lo excitante de la situación. Mi cuñada observada por tres desconocidos. Después de unos minutos tomé el teléfono y llame a una de ellos con la excusa de preguntar si necesitaban algo, y pude notar en su voz la excitación. Los tenía a los tres locos, con sus poses de yoga, lo que era acrecentado por el tamaño de las tetas de mi cuñada. Llego la hora de retirarme de mi oficina, con la enorme erección entre mis piernas, la cual oculte como pude, para no ser sorprendidos por mis compañeros, el problema lo tuve en el ascensor del edificio, estaba repleto, así que estábamos todos apretados. Para mi mala suerte, delante mío que una rubia, con cara de pocos amigos, que venía a revisar algunos procesos administrativas de mi empresa. Con la cara de sería que siempre traía consigo, no me había percatado del bello cuerpo que tenía, o por la extinción que traía que la encontré muy guapa. En cada piso subía más personas al ascensor, por lo que ella ya estaba contra el mío, no dije nada, pero ella debió notar con toda certeza la erección que traía encima. Fue muy vergonzoso, que se diera cuenta de eso, siendo que al día siguiente tendría una reunión con ella a primera hora. Eso me saco un poco de mi mente, la situación que ocurría en casa, mi cuñada ...