Pagando con la misma moneda (I)
Fecha: 14/04/2019,
Categorías:
Transexuales
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... quería escuchar la música y que por eso me había metido al bar, a lo que me contesto "Debo entender que eres romántica y a mi me gustan las mujeres así", yo le conteste con candidez que era muy atrevido que apenas me había visto y ya quería ligarme, nos reímos y brindamos, como su platica era muy agradable y abierta no me había dado cuenta que ya había terminado con mis bebidas y ya me sentía mareada, me había dicho que se llamaba Luis y yo me había bautizado como Carla, era el femenino de Carlos, como me llamaba, y como siempre me había gustado decidí que así me llamaría de mujer. Luis no dejaba de adularme y decirme que estaba preciosa, yo ya me sentía muy excitada y creo que no lo podía ocultar, cuando me di cuenta Luis ya me tenia abrazada y con su mano acariciaba discretamente mis muslos, en un momento nos vimos a los ojos y no pude evitar que me besara, al principio suavemente y luego con pasión uniendo nuestras lenguas, me sentía en las nubes nunca había besado a un hombre y me parecía lo máximo, ahora me decía al oído que si íbamos a un motel que estaba ahí cerca, estaba a punto de aceptar sin pensarlo, pero recordé mi verdadera condición, mi fantasía iba mas allá de lo planeado pero deseaba con toda mi alma que se realizara y estaba a un paso de lograrlo, por lo que me arme de valor y le dije que quería aclararle algo, el pensó en ese momento que yo era una prostituta ya que me dijo "Te pago lo que me pidas realmente lo vales estas de lujo", me halago que pensara ...
... así y acercándome a su oído le dije que era travesti, por un momento pensé que me iba a mandar a volar pero cual seria mi sorpresa cuando me contesto "Muñequita pareces toda una mujercita y yo ya estoy bien caliente y no me voy a echar para atrás, así que si aceptas darme tu culito pues adelante", sin mas pidió la cuenta y salimos del bar, le dije que llevaba mi auto pero el me pidió que nos fuéramos en el suyo y luego me traería de regreso, no tardamos en llegar al motel de esos en los que el auto llega hasta la puerta de la habitación, era un lugar muy cachondo con espejos por todos lados, apenas habíamos entrado me abrazo por la cintura pegándome a el besándome apasionadamente y haciendo sentir su tremenda erección sobre mi vientre, bajando sus manos de mi cintura a mis nalgas acariciándolas por debajo de mis pantaletas y con sus dedos buscando mi ardiente culito, me separe un momento para decirle que tenia que pasar al baño, ya en el baño me baje la pantaleta y me senté a orinar, en esas estaba cuando vi que había un bidet, pensé que seria buena idea estar limpia para mi estreno, me quite la pantaleta y abriendo las piernas me senté soltando los chorros de agua en mi hoyito, sentí como entraban en mis entrañas y expulsaba el agua, operación que repetí varias veces hasta que me sentí limpia, me seque y me puse una buena cantidad de crema que llevaba en mi bolso en mi ansioso hoyito para lubricarlo, así como un poco de perfume, me puse la pantaleta y salí a la recamara al ...