Rosalinda, mi primera travesti
Fecha: 15/04/2019,
Categorías:
Transexuales
Autor: susonn, Fuente: xHamster
... violencia. Con una mano me apretaba un pezón, muy fuerte, y con la otra acompasaba los movimientos que yo le daba a su polla.- Chupa, chupa, maricón!. Cométela toda. Te va salir la leche por las orejas. Eres todo para mí. Hoy te voy a follar bien follado. Te voy a dar mi lechita, cabrón. Qué bien la comes. Uhmmm. Chúpala, chúpala, guarra, putita. Y dices que no sos maricón, so guarro. Ahora verás, te voy a partir el culo en dos, te voy a reventar bien reventado, maricón.Rosalinda salió de golpe de mi boca. Estaba muy nerviosa. Me quitó los zapatos, tiró a toda prisa de mis pantalones y de mis calzoncillos y me dejó totalmente desnudo.- Mirad, qué polla tienes. Y con esa polla tú quieres hacer algo. Voy a convertirte en mi mujercita. Ponte a cuatro patas maricón de mierda que voy a follarte bien follado.En ese momento, todavía no sé por qué, obedecí sin rechistar, la travesti mulata me había dominado por completo; y ahí me veia en una cama extraña puesto por primera vez a cuatro patas, como un perrito, con el culo caliente y una mulata pollona a punto de reventarme para toda la vida.- Agacha la cabeza, bien agachadita. Ahora Rosalinda te va a hacer ver las estrellas, cariño. Uy, qué culo tenés, qué lindo y qué agujerito más cerradito. Eso no puede ser, un mariconcito como tú tiene que tener el culo mucho más abierto.Y Rosalinda abrió la mesita de noche, donde antes había dejado los doscientos euros, y sacó un bote con una crema fría que comenzó a extenderme en el culo. Me ...
... metió un dedito buen hondo y muy rápido, no me dolió nada, todo lo contrario, echaba en falta algo más gordo. Comenzó a mover en círculos ese dedo, cómo si quisiera dilatarme el culito. Lo sacaba y ponía más crema, mucha cremita, creo que gastó el bote entero. Luego noté que ponía la punta de su capullo en mi agujerito. Y movía su pollón de arriba abajo, de abajo arriba, en mi raja, como dándome brochazos. Eso me volvía loco, me gustaba mucho.– Fóllame, por favor, fóllame de una vez.Fue todo lo que acerté a decir, cuando de pronto noté un profundo calor interno y como la raja de una herida en mi culo. Me dolía mucho, no era tan indoloro como me había prometido, pero es que la mulata se había vuelto violenta, quería follarme de verdad.- Aguanta, maricón, aguanta; me gritó cuando yo lancé un grito desesperado. Entonces comenzó a darme palmotazos en los cachetes de mi culo, muchos palmotazos, con mucha fuerza, y a apretar más su polla para adentro. Se echó sobre mí y notaba su respiración ansiosa en mi nuca. Me estaba follando con muchas ganas.- Aguanta, maricón, aguanta. Qué culito más estrechito tienes, qué bueno, qué rico, qué me gusta. Me hablaba al oido echada sobre mí y las sensaciones dolorosas iniciales comenzaron a transformarse en un profundo bienestar. Me sentía lleno, completamente lleno. No quería estar vacío nunca más. Quería tener ese pollón de 25 cms. bien adentro, toda la vida. Rosalinda volvió a su posición inicial incorporándose y después de dos cachetazos comenzó ...