Mi culona hermana
Fecha: 17/04/2019,
Categorías:
Anal
Fetichismo
Masturbación
Autor: delmos2007, Fuente: xHamster
... mientras mi hermana gozaba con mi verga enterrada entre sus piernas. Apenas acabó le hice colocarse en cuatro patas para penetrarla de esa forma. Ella me pedía que lo hiciera con fuerza, que se la metiera lo más adentro posible y obedientemente lo hice, dándole fuertes empujones metiéndole la verga lo más adentro que podía haciéndole chocar mis bolas con su enorme culo. En esta posición duramos casi media hora, no quería cambiar, era la mejor forma de ver el enorme culo de mi hermana con mi verga metida entre ella, hasta que sorpresivamente mi hermana me pide por favor que se la meta en el culo.Jamás hubiese imaginado en toda mi vida escuchar esas palabras de la boca de mi hermana, y ni un segundo me demoré en sacarla de su concha y mientras ella mismas se separaba sus grandes nalgas, apuntarle la verga n la entrada de su culo, para posteriormente comenzar a penetrarla poco a poco en esa estrecha hendidura, hasta que mi verga llego al fondo. Mi hermana lanzo un grito de placer y echo todo el culo hacia atrás haciendo que la penetración fuera ...
... completa.Aferrado a sus grandes caderas la penetré como una bestia, partiéndole el culo con mis embestidas haciéndola gritar de placer. Era demasiado para mi, la imagen de mi hermana apoyada en la cama, con su espectacular cola levantada y mi verga deleitándose con esta. Ya había perdido la noción del tiempo, afuera comenzaba a aclarar y yo continuaba follando con mi hermana, hasta que ella comenzó a pedirme que le llenara el culo con mi leche y con tan solo escucharla, no pude contenerme mas y comencé a acabar copiosamente litros de semen dentro del culo de mi hermana que al momento de sentir mi descarga en su interior , comienza acabar nuevamente conmigo llenando el cuarto de quejidos.Mi verga permaneció todo el tiempo que pudo dentro del culo de mi hermana, hasta que en un movimiento se salió, blanda y bañada en semen. Por las nalgas de mi hermana corrían mis gotas blancas.Nos acostamos en la cama recuperando la respiración, sin decir nada. Afuera el sol ya asomaba y desnudos sobre la cama, acariciándonos, nos quedamos dormidos hasta el otro día.