Aprendiz de sumisa
Fecha: 18/04/2019,
Categorías:
Dominación
Fantasías Eróticas
Autor: GatitaY, Fuente: CuentoRelatos
... asustada por haber aceptado aquello o excitada. Bajo su mirada al suelo y me dijo: -Lo siento Ama Yadira. No volverá a pasar. -Así me gusta. Ahora fuera el resto de la ropa, quiero ver ese cuerpo gordo que tienes.- le dije, entrando en papel de dominante. Ella siguió desnudándose. Cuando la tuve en ropa interior pude apreciar que tenía un cuerpo bonito. Tenía barriga pero no era algo desagradable a la vista. Llevaba unas braguitas también blancas, que sin ser muy sexis eran bonitas. -¿Qué haces con bragas? Las putas como tú llevan tanga. Date la vuelta.- le ordené. -Lo siento Ama Yadira. Me siento más cómoda con bragas pero no volveré a ponérmelas si no le gustan.- me dijo ella, tremendamente sumisa para mi sorpresa. -Ya es tarde, ahora lo arreglo.- le dije. Con ella de espaldas a mí, dejando su grande y bonito culo a mi vista. Cogí sus bragas por la goma y tire hacia arriba con todas mis fuerzas, haciendo que la tela se la metiera en la rajita de su culo y posiblemente, también en su otra rajita. Ella se quejaba, pero poco, parecía no molestarle demasiado que la tratase así su mejor amiga. Manteniéndola levantada así, le solté un primer azote en sus descubiertas nalgas. -¡Ayyy! -No grites. Dime: gracias Ama Yadira y cuéntalos.- le dije, soltándola después otro azote. -Uno, gracias Ama Yadira.- dijo Dani, para después yo volver a darle otro azote en la otra nalga. -Dos, gracias Ama Yadira.- repitió ella. Así estuve hasta que llegue a 10. No me gustaba el dolor, pero debía ...
... hacerle de todo para que mi Amo e Itzel estuvieran contentos. Tenía el culo rojo por mi mano. La cual a mí me dolía. Por eso Itzel usaba su zapatilla de deporte para azotarme a mí. Le desabroche el sujetador y se lo quite, todavía no podía verlas, pero pronto tendría mis amadas tetas a mi disposición. -Date la vuelta tetona.- le ordené. Ella obedeció y se dio la vuelta dejándome a la vista sus dos enormes pechos. Eran preciosos, redonditos y grandes. Lleve mis manos a ellos y acaricie por primera vez la piel de esas tetas de ensueño, era muy suave. Las levanté con mi mano y pude notar como pesaban. Eran muy diferentes a las mías, mucho más pequeñas. Me divertiría con ellas. Deje caer sus tetas para ver cómo se movían al estar liberadas. Acaricie sus pezones, que ya estaban duros. Dani estaba excitada, perfecto. Los pincé con mi dedo y se los estiré. Ella dio un pequeño gritito, pero no se quejó. Tire de ellos hacia arriba, elevando sus tetas que quedaban colgando de sus pezones. Su cara era una mezcla de dolor, vergüenza y yo creo que placer. En esa posición los hice botar, subiendo y bajando de sus pezones. Tenía que dolerle, pues sus pechos pesaban y junto con el movimiento, podía ver como sus pezones se estiraban. Deje descansar sus tetas a su altura normal, pero sin soltarla. Ella me miró y yo sonriéndola, le pellizque ambos pezones a la vez. Ella aguantó todo lo que pudo, pero al final tuvo que gritar. Yo me reía en su cara. Mi amiga querida, lloriqueando porque yo la tenía ...