Entrando a un cine
Fecha: 19/04/2019,
Categorías:
Gays
Primera Vez
Autor: matialejo, Fuente: xHamster
... en práctica).El cine tal cual me habían detallado era grande y oscuro. Estaba bastante concurrido, llegué a la sala gay, me senté en una hilera cercana al fondo que no tenía persona alguna en su extensión de siete asientos a lo ancho y empecé a sentir como atrás mío, un chico le estaba dando una terrible mamada, por lo que se escuchaba, a otro bastante mayor y grande corporalmente. Debo contar que cuando ingresé a la sala, donde me sentaría, observé a ésta última persona que hasta en la oscuridad se podía apreciar sus grandes hombros como así su no muy abultada panza.El ruido de la chupada, con los pequeños gemidos, me excitaron mucho. A los pocos minutos, cuando quise girar la cabeza hacia la izquierda para poder apreciar lo de atrás, siento del lado derecho que me empiezan a tocar la pierna, subiendo lentamente hacia mi pene, cuando giro para mirar quien era “el acariciador”, veo un hombre de unos cincuenta años, morocho con un cuerpo bastante mas pequeño al del fondo, que me toma la mano llevándola a su bulto mientras con la otra me desabrochaba el pantalón, sacando mi verga totalmente erecta. Imité lo que hizo y me acerqué un poco más, llevando también mi otra mano para bajarle el cierre, liberando su instrumento que estando un poco flácido tendría una medida de dieciséis centímetros de largo por cuatro de grosor e iba aumentando de a poco, lo que me llevó a mirarlo. Sin comentario alguno, él pasó una mano por detrás de mi cuello, empujándome hacia su boca, besando, ...
... metiendo la lengua, provocando un temblequeo.Me pregunta que pasaba, le contesto que era la primera vez que besaba a un hombre, lo que me había provocado de repente, muchas ganas de continuar experimentando. Seguimos besándonos, sintiendo una mano con dirección a mi culo, que logra acelerarme aun más la respiración. Dándose cuenta de esto, me propone que fuéramos al sector de los reservados, atravesamos un pasillo en el que se podía observar bastante gente apoyada a la pared esperando entablar algún contacto u otros charlando, nos detuvimos en un sector aun menos iluminado y mi “reciente conocido” golpea una puerta, al no escuchar ninguna respuesta entramos a una especie de cabina (luego supe que había sólo tres en el lugar) que tenía dos sillones, uno mas pequeño y otro mas grande. La puerta no tenía llave entonces la trabé con el sillón mas chico. Mientras tanto mi compañero parado contra una pared se bajó los pantalones, me jala hacia él, toma mi cabeza y continuamos lo iniciado en la sala besándonos desenfrenadamente, con sus dos manos en mi cara me mira y tratándome de pendejo me pregunta hasta donde me animaba a llegar, mi repuesta fue rápida, desafiándolo de hacer todo lo que él tuviera ganas. Con cara de ganador me afirma que prepare el orto porque esa noche me iba a retirar cansado de haber recibido tanta leche. Luego de sus dichos me hace arrodillar para que se la chupara y empecé a hacer lo que tanto me había gustado que me hiciera aquella primera novia. Llené mi mano ...