1. Seguimos en la Casa de Campo


    Fecha: 29/10/2017, Categorías: Sexo en Grupo Autor: murgis, Fuente: RelatosEróticos

    ... hicieran lo que quisiesen, ellas se rierón y me dijerón ¿porque luego nos entra la tuya holgera no jaja ? Cuando llegamos al campo, nos encontramos que en el chalet no estaban ni mi mujer ni Teresa la mujer de Ricardo, a lo cual este contesto, seguro que están follando con el moro, pero se equivocó pues yo llamé a Alim y me dijo que habían salido a dar un paseo a caballo por la sierra, el cabrón miro a las dos mujeres con cara de lujuria, ya quería mojar, a lo que le conteste que quieto semental que antes las pruebo yo. Decidimos ensillar los otros dos caballo y salir con estas dos mujeres a la grupa ir a buscarlas pues se estaba acercando la hora del almuerzo, y cogimos una ruta que sabía yo que a mi mujer le gustaba hacerla porque dentro de ser Sierra había un camino muy bueno para pasear a caballo. Llevábamos andados unos 3 kilómetros y nos paramos los cuatro en una fuente que tiene un agua muy fresca y bebimos nosotros y los caballos, pero una de las chicas se retiró un poco para hacer sus necesidades y viene corriendo donde estábamos nosotros y nos dice, “ venir venir ahí hay dos mujeres con dos tíos follando, y una creo que es mi cuñada Teresa”, a mí no me han visto, nos fuimos a verlos y efectivamente estaban mi mujer y Teresa, con dos tíos de no más de 35 años que tenían las escopetas apoyadas en un árbol pues iban vestidos como cazadores las tenían a cuatro patas cogidas sobre una encina dándole polla,ellas están disfrutando de lo lindo, Ricardo solo comento una ...
    ... cosa“veréis como me la preñan a mi mujer, porque de mi no se preña, de esto o me sale el hijo moro o cazador jajá”, nosotros con la hermana y la amiga de Ricardo mirando cómo se desarrollaba la follada,escondidos los cuatros, y estábamosya cogiendo una calentura de cuidado nos sacamos nuestras pollas y empezamos a pajearnos, la hermana de Ricardo y Almudena empezaron a míranos con cara de enfadas, y dijeron que para que estaban ellas allí, nos cogieron nuestras pollas y empezaron a pajearnos, a mí me lo hacia la hermana Encarna, y a Ricardo Almudena, que después de darnos un par de sube y baja, empezaron a chúpanoslas con mucha gana, lo que consiguieron ponernos las pollas como Mástil de bandera. Mi mujer y la de mi amigo estaban ahora sentadas en un tronco de la encina y los desconocidos estaban dándole que te pego a su follisqueo, que al parecer por lo bufidos de los cazadores se veía que se iban a correr como así lo hicieron se decían uno al otro que suerte tenían con haberse encontrada a esas dos maduritas cachondas aunque Teresa era más joven que ellos. Nosotros nos hicimos los despistados cuando vimos que ya estaban ellos con sus pantalones subidos y ellas con los suyos, hicimos como si hubiésemos llegado en ese momento no sospecharon que lo habíamos visto todo, los cazadores nos saludaron y siguieron con su caza, a mi mujer le presentaron a los dos chicas a Encarna y Almudena, y volvimos todos juntos a la Casa, para intentar comer algo porque teníamos mucha hambre era las ...