Confesiones del Padre Arturo: Katy parte 3
Fecha: 26/04/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Padrearturo3, Fuente: SexoSinTabues
... logro apreciar a esa niña totalmente desnuda y lista para mis propósitos. La tenia lista para mis planes nada decorosos. -Padre.- me señala mis bóxer Katy cuando sin darme cuenta no había logrado cubrir mi erección y se notaba por encima de la tela. -Si. Está muy contento porque hay una hermosa niña que bendecir.- le digo acariciando su cabecita. Katy sonríe de orgullo ante mis halagos como toda niña contenta por el cumplido.- Así que vamos a esforzarnos por hacerlo bien. ¿Si? -Sí, Padre.-contesta feliz Katy. -Muy bien, necesito que te coloques así encima del colchón.- digo mientras le muestro que debe colocarse como si estuviera gateando. -Así, Padre?- pregunta Katy colocándose en posición de perrito lo cual resaltaba sus tentadoras nalguitas que no parecían para su edad. Sin embargo esto no la hacía gordita ya que poseía una cinturita de avispa que las resaltaba más, no había duda que esta niña era perfecta para mis gustos. -Así es, mi amor.- le digo acercándome y contemplando extasiado a esa niña que me ofrecía su culito respingón con total inocencia.- Muy bien…- le decía mientras me tomaba la paciencia de acariciar esas nalguitas sabiéndome dominador de la situación. Tomo de mi costado el frasco de lubricante, abro y comienzo a derramar copiosamente el contenido en la abertura de sus nalguitas. -Jijiji.- ríe Katy al sentir el contacto del lubricante con ella. -Muy bien, Katy deja que te lo esparza…-digo al mismo tiempo que con mis dedos comienzo a tallar la parte cercana ...
... a su anito. -Padre, ese lugar… es sucio…-me contesta Katy apenada por primera vez. -Por eso necesito limpiarte este lugar, Katy. Es muy necesario.-le digo mientras no me detengo en mi labor de asegurarme que su anito se encuentre lubricado. Luego de lubricarlo, tomo una pequeña caja que se encontraba muy cerca de donde saco los dos juguetes requeridos para esta ocasión. -¿Qué es eso, Padre?- pregunta Katy curiosa al verlos. -Estos son juguetes que nos van a ayudar con la bendición, mi vida.- le digo. Tomo las bolas chinas y se las muestro antes sus ojos. Katy al principio pareciera querer jugar con ellos pero la detengo.- Katy ahora debemos concentrarnos en la bendición, no lo olvides. Coloco a Katy nuevamente en su posición abriendo bien sus piernitas mientras acerco una de las bolas chinas a la entrada de su anito. -Muy bien, Katy. No tengas miedo con lo que voy a hacer, es un ejercicio que nos va a ayudar con la bendición especial así que debes resistirlo.- le digo tratando de disimular la emoción que poseía.- ¿Me has entendido? -Si, Padre.- responde Katy. -Muy bien… comencemos.- digo en el preciso momento que intento introducir una de ellas en su anito. -Aucchh…- reacciona Katy y por momentos quiere resistirse a ello. La sujeto bien para que no se mueva y con algo de dificultad logro introducir la primera de ellas. -Shhh… cálmate, tranquila Katy… tranquila... No pasa nada, no pasa nada…- le digo al oído.- Ya paso. Así es al comienzo. -¿Por qué duele, Padre?- pregunta Katy ...