La sorpresa
Fecha: 03/05/2019,
Categorías:
Dominación
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Yo siempre le había hecho saber a mi pareja mis inclinaciones por las ataduras y la esclavitud, practicándolo por hacer algo distinto mas no por que a el le entusiasme. Luis vive en un apartamento solo y yo vivo con mis padres. Generalmente el lleva su ropa a lavarla y secarla en mi casa, y luego yo lo llevo con los equipajes de ropa limpia a suya. Uno de esos días que lo lleve, lo ayude a subir a su apartamento los bolsos por que el solo no podía con todos. Al subir al ascensor cargados, el se libero las manos dejando todo en el suelo mientras yo cargaba lo demás y tenia las manos ocupadas, al cerrar las puertas me miro a los ojos, me pellizco y retorció una teta con toda su fuerza y sonrió. Al llegar al piso, entramos al apartamento, nos deshicimos de todo lo que cargamos y yo enciendo el televisor, mientras el se encargaba de sacar la ropa de los bolsos. Al terminar de hacerlo se dirige a mi y me dice: -Te tengo una sorpresa, ¿quieres que te la de ahora o después? Cabe destacar que generalmente cualquiera de los dos no pasamos comprando juguetes íntimos para nuestras relaciones. En el momento yo pensé que seguro había comprado algo para jugar y le digo que prefiero que me la de ahora. -Okey, entonces siéntate en la cama, mira hacia la pared y cierra los ojos. Yo inmediatamente lo hice, el con la desconfianza de que yo pudiera ver, me tapo los ojos con estos tapa ojos oscuros que dan en los aviones. -Te tapare los ojos no quiero que lo veas, solo que lo sientas. Además ...
... pon las manos en tu espalda, te esposare para que no puedas tocarlo. Yo me empecé a poner nerviosa, no sabia que me iba a dar, sin embargo obedecí. -Ahora abre la boca, te voy a amordazar -no quiero escuchar ni una pregunta. Su actitud me extrañaba, era muy raro cuando el usaba eso de su voluntad sin que fuera sugerido por mi, sin embargo accedí y abrí la boca e introdujo en ella una bola tan grande que yo no podía ni tragar la saliva. Yo estaba completamente vestida, así que me levanto la camisa y bajo mi ropa interior quedando mis tetas totalmente descubiertas. Empezó a besarlos y a morderlos con una fuerza que me enloquecía y me hacia humedecerme cada vez mas, usaba los dientes por que con las manos me tocaba todo mi coño metiéndome el dedo a la vez que mordía mi pecho, así estuvo mucho rato, ya me ardían los pezones de tanto retorcérmelos y yo completamente atada sin poder decir nada. De repente, cuando yo estaba bien excitada, paro y no me toco más. Como yo tenia los ojos completamente tapados en la oscuridad del tapaojos escucho un sonido como el de la nevera abrirse, me imagine que el me observaba mientras, yo me excitaba de imaginarlo viéndome así. Saco hielo, lo escuche sacarlo de la gavera. La angustia e incertidumbre me excitaba cada vez mas, la angustia de no saber que iba a hacer o que hacia, tal vez yo me imaginaba que el me observaba y resulta que el me estaba ignorando completamente. Yo ya no sabia que pensar. De repente me dijo: -Parate.- Agarrandome por los ...