EL MARIQUITA PT. 2: EL DESVIRGAMIENTO - Relatos Eróticos

EL MARIQUITA PT. 2: EL DESVIRGAMIENTO

... tenia que hacer, comencé a cabalgar a ese macho y cada vez lo hacia mas y mas adentro hasta el punto que me sacaba su guevo y me lo metia entero mas rápidamente, me sorprendió de mi mismo, jamás pensé que supiera hacer todo eso. C: aaah dioos que ricooo, no pareces virgen perra, naciste para complacer a machos como yoo sigue moviendoteee ahhh Y: aah aaah ahhhh Dure como 5 minutos cabalgando y moviendo mi culito en círculos como si estuviese bailando, eso a el lo enloquecía y a mi me enloquecía que el lo gozara, me hizo voltearme y asi quedamos cara a cara, me agarro por las nalgas y comenzó a penetrarme duro como al principio, en esa posición podía sentir mas su guevo dentro de mi, por fin podía ver su cara de macho excitado, era demasiado rico verlo gemir como macho, y sus expresiones faciales eran muy toscas, era como si estuviese enfadado pero de placer ejeje no se si me entiendan, yo estaba con mi cuerpo erguido y comencé a tocar mis tetillas, el al ver eso, me quito mis manos y me hizo que las pusiera en su pecho velludo y que me bajara un poco hacia el, alzo su cabeza hacia mis tetillas y comenzó a chuparlas y moderlas con devoción, era riquisiimoo, esto sin dejar de penetrarme duroo Y: aaaah papii que rico me encantaaaaa aaaah sigueee ahh C: te gusta mami? Y: siiii aaaaah Luego cambio de posición y de puso de nuevo en el sofá, levanto mis piernas y las puso en sus grandes hombros, era increíble el contraste de su piel con la mia, el moreno muy oscuro y yo blanco ...

... como la leche jeje, y no solo el color si no nuestros cuerpos eran opuestos, todo en el era grande fuerte y yo era pequeño y débil. De un solo golpe volvió a meter su guevo en mi culo, ya no sentía dolor, solo quería que nunca acabara, comenzó a darme duro, este hombre no tenia piedad conmigo, era como si se hubiese transformado, me agarraba por el cuello, y comenzó a darme cachetadas (bofetadas) duras, que pusieron rojas mis mejillas, y a pesar de que me dolia me gusto muchisimooo, yo no decía nada, solia gemia, el a ver que no oponía resistencia me daba mas duro y me cacheteaba mas, eso lo ponía loco, me escupía, me halaba del cabello, se había transformado por completo, ya yo no gemía, si no más bien que gritaba de placer Y: aaaah ahhhh aaaah siii papiii sigue asiii aaah C: eres la mejor mariquita que me he cojido aaah aahhh– dijo confirmándome asi que yo no era al único gay al que se había cojido, pero en ese momento solo me importaba el nuevo placer que desconocía, me gustaba que me trataran mal Y: aaaaaaaaaaaaaaah ahhhhhhhhhhhh C: jajajaj pero mira que perra estas hecha, sientes placer pero tu pequeño pene no se para – y era cierto mi pene no estaba parado completamente, solo un poco, y obvio que no era grande porque era diminuto jeje y es que a mis 11 añitos, ya me había masturbado varias veces por el pene y me salía lechita, pero me masturbaba mas era por el culito pero nunca acababa. C: Te voy a hacer acabar por el culo ya veras mariquita Y: si hazlo papi, haz lo que ...