Mi problema moral
Fecha: 31/05/2019,
Categorías:
Voyerismo
Grandes Series,
Autor: Eltodasmiasreal, Fuente: CuentoRelatos
... acontecimientos ocurridos… ¿¿será la foto del…?? No creo, hasta esos bastardos tienen límites- dije muy preocupado, pero aún más excitado que antes ¡Tonterías!- dije- seguro es una casualidad -buenas noches bebé- me escribió Aún con esa ola de calor abrumante en todo mi estómago, en lugar de parar con aquello decidí seguir la corriente, pues en fin, ¿qué podría ser lo peor que pasara? Justo después de acostarme tuve un sueño muy extraño, uno donde mis más grandes fantasías sexuales se manifestaron. En éste mi madre fue la protagonista, seguida de mis amigos. Mi madre tan adorable e inocente apareció frente a mí vestida con trajes tradicionales, es decir primero con sus faldas largas y después sus shots deportivos holgados, eso sí, siempre manteniendo su cálida sonrisa, una maternal y rebosante de amor. Ante ese aspecto me acerqué a ella para abrazarla y darle el cariño que un buen hijo le debe a su madre, así pues le di el mejor abrazo de mis sueños, uno caluroso en donde ambos demostrábamos cuánto nos queríamos ¡hasta que de pronto! La escena se trasformó: Mi madre a varios metros de mí ahora me daba la espalda; ella empinando su culo comenzó a bajar su short con lentitud y mucha sensualidad; aquel culazo lo agitaba desesperadamente para sacarse la prenda. Cuando ella notó mi presencia giró la cabeza para de inmediato sonreírme, mostrándome así sus increíbles dientes blancos y una mirada penetrante por su sensualidad. No obstante de pronto se subió de un jalón su pans, el ...
... semblande de su rostro cambió a uno burlón y comenzó a caminar con mucho descaro; meneando su increíble monumento, por cada flexión su short se volvía más pequeño y apretado hasta convertirse en una calza rosa idéntica a la de Fátima, la que tiene en su foto de perfil, pero obvio más rellena ¡woow! Pero qué diosa hay aquí Impulsado por el morbo en extremo corrí desesperado hacia ese vaivén, pero justo antes de tomarlo recibí un golpe, como si hubiese chocado con un muro. Cuando alcé la vista vi a Ramiro más grande de lo normal, como si fuese un gigante; asustando miré a mi madre para buscar su protección. En cuanto la miré me llevé otra sorpresa, ella estaba dándole la espalda a mi amigo Luis; Ella con una sonrisa de satisfacción en su rostro, una de gata en celo, con las mejillas y frente sonrojadas, y las facciones expresando un placer inigualable; estaba ligeramente encorvada con aquella licra justo a la mitad de sus muslos recibiendo el mejor beso negro de su vida. Luis le devoraba sin descanso su culo, como si se tratase de la última tarta de mora del mundo. Tanta fuerza y compromiso le metió aquel dichoso a su trabaja oral que mi madre sin parar de jadear como un animal empezó a correrse con una fuerza sólo digna de aquella fantasía. Se contraía una y otra vez, doblaba su cintura, hacia vibrar sus muslos desnudos, el sudor recorría su sonrojada frente sin detenerse. Con todo, mientras ella continuaba gritando en su éxtasis, Ramiro aun manteniendo aquellos dos metros de ...