La perra de todos - Parte 2
Fecha: 02/11/2017,
Categorías:
Transexuales
Autor: adrianalucia80, Fuente: SexoSinTabues
... maravilloso sentirme una mujer deseada y poseída por un grupo de machos morbosos, mientras por unos instantes permanecía inmóvil, relajada y llena de placer y semen… habiendo perdido la voluntad y hasta la noción del tiempo, cerraba mis ojos dejando que ellos hicieran conmigo lo que quisieran. Todos esos macho se turnaban para disfrutar las delicias de mi culo indefenso, uno tras otro me cogía sin compasión, sólo querían disfrutar de mi apretadito y delicioso ano, el cual les ofrecía para que lo disfrutaran a su antojo y me concentraba para sentir en mi culo los explosivos orgasmos de todos ellos, sólo deseaba ser follada e irme con mi goloso culo saturado de semen. El tiempo pasaba mientras todos me follaban una y otra vez. Había tenido ya 2 orgasmos anales cuando de repente se encienden todas las luces indicando que son las 3 am y era hora de cerrar el bar, pero una voz me dice “mamacita, tranquila, déjame terminar en tu culito” y yo sólo moví la cabeza afirmativamente y el macho que me cogía continuó follándome a plena luz… todos seguían ahí, hasta que finalmente mi último macho desenfrenado termina dentro de mí con fuertes chorros de leche, llenando aún más mi saturado culo. tenía ya mi recto totalmente saturado de semen y mi ano dejó escapar algunas ...
... gotas del delicioso néctar. Me quedo sentada uno 20 segundos y me pongo de pie con la faldita levantada dejando ver mis nalgas y me la acomodo para no salir tan desarreglada después de tanta follada que recibí durante una 9 horas por mas de 10 tipos, quizás más de 15… perdí la cuenta de cuantos hombres me hicieron suya, perdí la cuenta de cuantas veces fui follada por cada uno de ellos. Cuando estoy atravesando la puerta para salir de la habitación siento que varias manos atrevidas se meten por debajo de mi falda y manosean mis nalgas… yo me detengo un instante para dejar que lo hagan y les digo “No me quisiera ir, quisiera más pero ya nos echaron” y seguí caminando coquetamente tras recibir varias y deliciosas palmada en las nalgas, deseando que alguien me hiciera alguna “propuesta indecente”. Llegué al mostrador del bar para pedir mi cartera, luego me dirigí al baño para retocar mi maquillaje, en especial mi labial rojo que hacía ver muy provocativos mis labios. No me cambio el atuendo, así que salgo con el mismo minivestido y sandalias de tacón alto, me veía muy linda, como puta pero definitivamente linda. No me quise cambiar porque quería que me vieran como una puta y que alguien se acercara a hacerme una propuesta indecente. Esta historia continuará…