Manuela (13)
Fecha: 11/06/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... que las maestras se llevan al marido y las medio hermanas y yo nos llevamos a la esposa a mi suite. No puedo evitar pensar en un caramelo que va a ser devorado por una turbamulta de chiquillos que salen hambrientos del colegio. En momentos estamos los cuatro completamente desnudos. La joven se ha sentado en uno de los grandes sillones del dormitorio y observa (sigue mirando con esa expresión un poco tonta) como en la cama Julia y Carmela me tocan, besan y lamen suavemente al principio y con mayor excitación poco a poco, hasta conseguir que mi polla empiece a parecerse realmente a un útil válido para chingar. "¿Te gusta la jovencita, verdad?; ¡vaya par de tetas!, hasta a mí que no soy nada torti me dan ganas de probar esas pirámides", dice Julia a mi oído lo suficientemente alto para que la admirada se de cuenta. Habrá sido la frase o el calentón que todos llevamos encima desde la sauna, pero Teresa se levanta, se dirige hacia la cama, coge mi cabeza, me da un muerdo largo, chupón y baboso, se pone en pie y dirige mi boca hacia sus tetas. ¡Joder, qué maravilla!, no se si hasta ahora me había mamado y comido unos pechos con unos pezones tan largos, gruesos, tiesos y duros; comparto la frase que, muy excitada, medio grita Julia ("¡qué excitante, parecen pollas pequeñitas!") cuando también ella empieza a comerle las tetas con verdadera gula. Carmela se ha sentado en el sillón, nos mira y se introduce con calma varios dedos en el sexo ("me pone mucho veros a los tres; qué ...
... excitante"); mientras no nos cansamos de estos globos estupendos y su dueña empieza a hablar, por fín, en voz baja que va subiendo de tono e intensidad al mismo tiempo que sube su excitación ("aayyy; qué bien; qué gusto, uuaayyy") y moja su sexo como si un grifo estuviera abierto. Me levanto, empujo su culo para que se arrodille en el borde de la cama y meto con facilidad mi polla en un coñito muy ajustado, tremendamente caliente y empapado como pocos, muy mojado, mucho. Julia está desmadrada con las tetas de Teresa, lame, besa, chupa, muerde, se restriega los pezones por todo el cuerpo y está intentando colocarse de manera que pueda acercar su sexo hasta los grandes pezones erectos. Llevo ya varios minutos bombeando a tope en el chochito de la joven esposa y me excita más y más la actitud fiera y glotona de Julia que ha conseguido colocarse para restregar su sexo con los pezonazos que tanto nos excitan y dando grititos se corre durante muchos segundos, desplomándose en la cama evidentemente cansada. Yo eyaculo en ese momento y Teresa ha pasado a dar bufidos, gemidos y gritos en voz alta ("me gusta; sigue, sigue, no pares") hasta que queda callada y quieta durante tres o cuatro segundos y después casi nos asusta con un bramido ronco, fuerte y largo que parece salir de lo más profundo de no se sabe dónde. Es evidente que Carmela ha tenido su orgasmo porque la habitación se inunda del maravilloso perfume de su sexo. El sexo y el acohol nos han hecho dormir más de tres horas. Teresa y ...