1. Con mi padre y el entrenador...


    Fecha: 29/06/2019, Categorías: Gays Primera Vez Autor: renovatio111, Fuente: xHamster

    ... bulto bajo el short – justo aquí – señaló – en mi verga.La palabra quedó flotando en la de pronto sofocante oficina.En su verga – repitió Manuel, paladeando la palabra también mientras miraba la mano del entrenador acariciándose.Sí – continuó el entrenador – y comenzó a mover su pie sobre ella, logrando que se me parara.Y qué tanto se le paró? – siguió Manuel inmerso en el juego.Mas o menos como ahora – aclaró el otro – mire.Enganchó la parte superior del short y la bajó dejando salir su gruesa y venosa verga, coronada por una rosada cabeza completamente pelada y una maraña de oscuros vellos alrededor.Pues sí que la tenía bien parada – fue el quedo comentario de Manuel, bajando el ziper de su bragueta mientras lo decía.El entrenador comenzó a masturbarse sin perder de vista las manos de Manuel hurgando en sus interiores, hasta ver su mano emergiendo con un grueso vergajo aun más grande y cabezón que el suyo.Y entonces? – preguntó Manuel comenzando también a masturbarse, pendiente de su interlocutor.Entonces – continuó el entrenador sin dejar de acariciarse – continué mi masaje tratando de pasar por alto la grave falta de su hijo, pero la cosa se puso aun peor.No me diga? – alentó Manuel casi con insistencia.Pues sí – dijo el entrenador bajándose un poco mas el short para dejar que sus peludos huevos asomaran también sobre la prenda – Ricardo se acostó primero boca arriba, logrando que la toalla se corriera para que pudiera verle la verga y sus huevos.Eso hizo mi muchacho? – ...
    ... preguntó Manuel al tiempo que aceleraba los movimientos de su mano, masturbándose.Si – aceptó el entrenador – y como esa exposición era totalmente indecente y falta de respeto, le pedí que se diera vuelta boca abajo, y él obedeció, aunque creo que con el único fin de que asi pudiera entonces verle las nalgas.Y se las vio? – la mano subiendo y bajando mas aprisa.No tuve mas remedio – dijo el entrenador acelerando también sus movimientos – estaba allí, haciendo mi trabajo, dándole un masaje, subiendo por esas piernas largas, casi obligado a tocarle sus hermosas nalgas.Pobre de usted – se compadeció Manuel jadeando ya.Y lo peor – terminó el otro ya con la respiración agitada – casi me obligó a que le metiera un dedo en el culo.Tuvo que meterle un dedo en el culo – coreó Manuel excitado y a punto ya de venirse.Sí, - el entrenador comenzó a sentir las fuertes convulsiones del orgasmo – un dedo, mmmm, en su culito, mmmm, tan apretado, mmmmm – y explotó.Manuel también lo hizo, casi al mismo tiempo y sin dejar de mirarse el uno al otro, mientras ambos se corrían, bebiéndose con los ojos, inmersos en la extraña fantasía de aquel juego.Finalmente el entrenador tomó un pañuelo desechable y le pasó otro a Manuel. Limpiaron el desastre y se compusieron las ropas. Se sonrieron cómplices y se dieron las manos, aun olorosas a sexo y semen.Y que a va pasar ahora con Ricardo? – preguntó Manuel entonces.La falta es grave – dijo el entrenador.Lo acepto – dijo el padre conciliatorio – pero algo ...