Las vacaciones en Itapirubá I
Fecha: 06/09/2017,
Categorías:
Sexo con Maduras
Masturbación
Tabú
Autor: marcelalita, Fuente: xHamster
Con poco más de treinta años de edad una imprevista ruptura matrimonial y un voucher por quince días de alojamiento en un hotel sobre el mar al sur de Brasil me llevó a un lugar soñado, donde la soledad sería mi compañía.A pocas horas de empezar el año estaba embarcando en un avión que me llevaría a Florianópolis en Brasil, de ahí en un viaje de unas horas a un hotel. El grupo de viajeros era heterogéneo, predominantemente parejas, novios, matrimonios, pocas familias y yo la única persona sola.El voucher (crédito por el alojamiento y comida en ese hotel) era por quince días. Llegué y una habitación en un cuarto piso frente al mar me auguraba el descanso necesario para dar una vuelta de página a mi vida.Acomodé mis cosas, me puse una escueta bikini y descalza salí a recorrer el lugar, en la pileta de natación se veía mucha gente, otros aprovechaban el mar, el hotel estaba en medio de la nada, sobre todo hacía el sur una playa extensa, con poca pendiente invitaba a caminar.No pocos hicieron lo mismo y así en pequeños grupos se iban alejando del hotel y en la medida que la distancia al mismo era mayor quedé sola.La hora, el calor me hicieron transpirar mucho y de vez en cuando me metía en el mar para refrescarme y hacer pis. Realmente había ido poco preparada, así que me volví al hotel, me metí en la pileta y nadé hasta cansarme.En la habitación me dí una ducha y desnuda fui al balcón, aprecié que no me verían y mi crecido vello pubiano simulaba a la distancia una tanga, a lo ...
... sumo dirían que estaba haciendo toples. Pasé la tarde así y en lo sucesivo mi estancia estancia en la habitación sería siempre en cueros.El segundo día desayuné y de inmediato empecé a recorrer la solitaria playa hacia el sur, llevaba en un morral, agua, protector solar etc. Viendo que no había nadie de inmediato me saqué el corpiño de la tanga y al rato, ya bien alejada del hotel decidí desnudarme, segura que nadie me vería. La suave brisa, el sol y el lugar me daban paz interior, de a ratos me metía en el mar donde mi largo vello pubiano seguía el ritmo de las olas.En un momento cansada me alejé unos metros del mar me acerqué a unos médanos, me tiré en la playa sobre una toalla, a la vez de tomar líquido. Desnuda en medio de la nada me sentía liberada, feliz y mi cabeza dejaba de lado pensamientos negativos.Me adormecí y al rato me pereció escuchar voces, la posición del sol no me dejaba ver bien, tomé mi toalla y me cubrí y cuando mi vista se aclaró veo pasar dos matrimonios mayores delante de mí, a la distancia me saludaron, eran huéspedes del mismo hotel, personas mayores de unos cincuenta años. Las mujeres estaban en toples con sus corpiños en la mano, ellos desnudos. Sus cuerpos no eran bellos pero su actitud si, conversaban, reían y se acomodaron a unos metros de mi.Yo decidí seguir desnuda, estaban a unos cien metros. Al rato veo que las mujeres se habían desnudado y seguían reunidos, se metían en el mar y de a poco sin querer estaban cerca mia, saludándome con una ...