VACACIONES EN LA HACIENDA DE MI TÍO - Relatos Eróticos

VACACIONES EN LA HACIENDA DE MI TÍO

Las apariencias engañan y soy testigo de ello, la vida se encarga que lo descubran a cada instante. Hola amigos espero que este 2016 la pasen mejor que el año pasado, me he inspirado gracias a sus comentarios escribir esta historia que me ocurrió el verano pasado en la hacienda de mi tío Ariel el hermano mayor de mi madre; tenia aproximadamente 13 años que la última vez que lo visite, para ese entonces tenía 19 años, siempre ha demostrado que me quería mucho. La hacienda estaba un poco lejos de la capital en auto como 8 horas, al llegar mi tío y si esposa se mostramos muy cariñosos y felices que los visitaran según ellos no me conocían porque había crecido mucho, esa noche hicieron una gran cena para nosotros tres ya que mis primos están casados y viven algo distante de la hacienda, por ese motivo me decían que sería su hijo menor por esos días. Al día siguiente mi tío quería que lo acompañara a conocer la hacienda para que viera los cambios que había hecho durante estos años que me ausente, llamo a uno sus caballerangos para que ensillaran los caballos, cuando giro para ver quién era, quede impactado con Marcos, es moreno como me gustan varonil de 26 años, de ojos chocolates sumado a una mirada penetrante, estaba sin camisa bañando a unos caballos, con pectorales, brazos y abdominales fuertes y voluminosos que tentaban besarlos, pantalones vaqueros ajustados que marcaban un trasero y verga de infarto, alto como de 1.88 cm. le calculaba y una voz muy varonil que me acabo de ...

... rematar, de pronto mi tía Teresa llama mi tío para decirle que tenía reunión urgente en el banco que lo esperaban en una hora. Mi tío se disculpó porque no podía salir de paseo conmigo, a lo que respondo que no se preocupe que otro día me mostraría la hacienda, el al ver que los caballos estaban listos le dio instrucciones a marcos que me acompañara a dar la vuelta y me describiera todo lo que había, él responde si patrón, pero al salir mi tío de la caballeriza observo que puso un gesto de molestia y me dice haber señorito capitalino monte su caballo para llevarlo a pasear como dijo su tío, al ver sus gesto me molesto y le respondo si tenía cosas que atender no tenía ningún problema que podía hacer el recorrido otro día, todo lo que me gusto al inicio lo mato con su actitud, el respondió yo acato la orden y tenemos que ir a dar el paseo señorito, a lo que le respondo está bien voy a ir, pero no me digas señorito que hace mucho que deje de serlo, mi nombre es Camilo. Salimos a dar la vuelta, él se mostró enojado siempre demostrando que le incomodaba estar conmigo nunca supe porque, fue entonces cuando decidí molestarle por su actitud y comencé a preguntar de todo hasta la mínima tontería que no venía al caso, sobre el ganado, los siembros y demás actividades que se efectúan en la hacienda y me respondía entre los dientes y al final me pregunto si en verdad quería saber todo eso, le respondí que si era importante para mí. Después de andar a caballo como una hora, llegamos a un ...