Esta noche o nunca - Relatos Eróticos

Esta noche o nunca

... comenzó a correr por mi espalda, tomó mi presión de nuevo y la encontró en valores normales._Nerviosita, me preguntó. _Si le respondí.Luego me tomó de una mano y acariciandome la palma me llevo a la balanza de pesas, donde me pesó y midió. Me hizo sentar en la camilla y me ascultó, en particular puso es estetoscopio en mis pechos supongo que escuchando más de la cuenta.A cada rato me miraba y sonreía en forma complice. Luego me dijo que me iba a revisar mi panza, me acostó y sus manos la masajearon más que revisarla, mi sudor se intensificó y mis nervios temí me jugaran una mala pasada. Sus manos llegaban a mi pubis y empezó a revisar mi tupido Monte de Venus, me preguntó porque no me lo depilaba y le aclaré que siendo el invierno en Argentina no lo hacía, pero que en el verano sí. Mientras me preguntaba sus dedos no dejaban de recorrer el Monte pubiano, mientras mi excitación crecía y mi flujo vaginal comenzaba a aumentar.Puesta en posición ginecológica, desnuda, comenzó la revisación de los pliegues vaginales, uno a uno, con calma y detenimiento mientras me preguntaba de mi vida sexual en detalle. Luego colocó dos dedos en mi vagina y uno en mi ano, cosa que nunca me había pasado aunque sabía era una práctica ginecológica.Sus dedos recorrieron con calma lo que había que recorrer con calma y parsimonia, mientras mi cuerpo estaba cercano al climax, mi mente estaba turbada, mi cuerpo excitado, la sudoración y el ...

... flujo vaginal eran crecientes y evidentes.Cuando creía que todo había transcurrido me hizo parar y parada de cara a la camilla, poner mis pechos sobre ella para asi revisar mi zona anal. Me hizo separar los glúteos con mis manos y recorrió la zona perianal.Por entonces mi excitación sexual era muy intensa me palmeó los cachetes de la cola y me dijo_Aqui no lo vamos a hacer, te espero en mi casa esta noche…Yo me tenía que ir al Aeropuerto, le dije cuando vuelva te veo y lo hacemos._Esta noche en casa o nunca, me contestó con voz segura, mientras me daba un beso profundo y sus manos iban a mi vagina.El teléfono sonó, ella lo atendió mientras con señas me decía que me vistiera, otro beso selló la cita y mi excusa de vieja inminente se repitió._Esta noche o nunca en casa, me volvió a decir.Salí transpirada olorosa no me pude bañar, atiné en el Aeropuerto a lavarme algo, pero mi cuerpo denotaba en sus olores el momento pasado.Ya de regreso en el avión mi mente sólo pensaba en la excitante revisación, en medio del Atlántico fui al baño y me masturbé intensamente.Días más tarde me llega la comunicación que comenzaba en el nuevo trabajo, la excitación de poder ver de nuevo a la médica que me revisó, era quizás lo que más me gustaba.Ya en España pregunté por ella y me dijeron que al poco tiempo de mi revisación había tenido problemas con varias chicas por como lo hacía, así que había renunciado y no sabían nada de ella.