El culo de Mariam
Fecha: 24/07/2019,
Categorías:
Anal
Primera Vez
Sexo en Grupo
Autor: roleplaylover2, Fuente: xHamster
... rápido, cada vez más duro. Pensaba que me correría enseguida. ¡Era tan delicioso!. Su coño era el lugar más confortable y cálido del mundo, y realmente hervía.Mariam empezó a hacer ostensibles muecas de placer, torciendo la boca, frunciendo los labios, moviendo la cabeza de un lado a otro. Mis 20 cm horadaban, ya sin piedad, la gruta del placer. Paré un momento y noté, con toda claridad, cómo su coño... ¡succionaba poderosamente mi polla! Los movimientos de sus músculos vaginales se asemejaban a una ansiosa boca chupadora. Su coño me estaba, literalmente, ordeñando la polla. Era flipante.Yo sentía que no podría aguantar tanto tiempo la excitación. Resolví follarla con más ahínco para darle al menos un orgasmo antes de correrme. Cabalgué sobre ella sin descanso, con pasión, frenéticamente, dispuesto a arrancarle un violentísimo orgasmo. Poco después, de improviso, Mariam arqueó la espalda, se estremeció de arriba a abajo, clavó sus uñas en mi pecho y brazos, y soltó un profundo y largo gemido, gritando: "¡Diiiioooosssss, ssssiiiiiiiiiiiii!!Durante unos instantes se contorsionó ferozmente, hasta que cayó rendida y agotada. Le había dado su primer orgasmo a Mariam, y parecía de los buenos. Mariam jadeaba con una amplia sonrisa en su cara de golfa. Abrí los ojos y me miró con malicia. Cómo contaros... Verla allí tumbada, con sus trencitas, sus tetones, su vientre, sus muslos, esa cara de puta satisfecha... Su mirada denotaba cualquier cosa menos inocencia. Noté que me iba. ...
... Ella también lo notó, pero en vez de pararme para correrme fuera me cogió por el culo y me aferró para que no se la sacara. "¡Mme corroo!", le advertí, pero ella sonrió, golfa, y me dijo "lo quiero dentro".Solté un largo y espeso chorro en su gran coño, una, dos, tres, cuatro, cinco veces... Ella no me soltaba, quería que me vaciara entero dentro de ella. No me soltó hasta que le dije que había acabado.Yo aún tenía energía y me quedé sobre ella observándola. Me miraba con aquella sucia sonrisa, con gratitud. Un poco respuesto, solté los muslos y agarré las tetas que tanto deseaba. Se las amasé con fuerza y ganas. No podía apenas abarcarlas. Las estiraba, las aplastaba, pellizcaba los duros pezones con malicia, las juntaba..., buuuuffffff. Mariam parecía gozar lo indecible con aquel repaso que le estaba dando.- ¡Oh, tía, pero qué tetas tienes, qué melones! Tienes las mejores tetas que he visto en mi vida... NNo he visto nunca unas tetas tan increíbles... Me voy a poner las botas... - ¿De verdad ? -me preguntó, complacida. - Joder, niña, te las voy a ordeñar, dalo por seguro -se rió infantilmente.Jugué con aquellos globos a placer dutrante un buen rato. Mariam gozaba, cerrando los ojos, concentrándose en la sensación de ser manoseada y amasada. Soltaba gemidos y suspiros. Era obvio que le encantaba que le metieran mano. Con el material que tenía entre manos estuve rapidamente preparado para volver al ataque. Mariam, no sé si por falta de experiencia, me acariciaba con fuerza el ...