Encontré a mi nena en el pub
Fecha: 25/07/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: JAYDEE, Fuente: SexoSinTabues
... me perdía en esos hermosos ojos verdes y en su escote regado de pecas que sentía cada vez mas cerca. Me calentaba saber que era una amiga de mi hija, de su misma edad. En un determinado momento, los demás se levantaron de la mesa con la excusa de ir a la pista para bailar un rato, dejándonos a Flor y a mi solos. La verdad que para ese entonces, ya no me importaba mucho mi hija, simplemente me alegre de quedarme solo con su amiguita. La charla siguió, cada vez mas intima, notaba como se iba pegando contra mi. Finalmente, durante alguna frase medio cortada, nuestras miradas se cruzaron y nos fundimos en un mojado beso. Solamente el contacto de esos dulces labios hizo que mi verga se ponga dura. Flor lo notó y comenzó a acariciarme por encima del pantalón. -Mmmm. me encantan los hombre bien viriles y maduros como vos Oscar. No sabes lo mucho que me calentas. - me decía entre beso y beso. Yo estaba en el paraíso, nunca pensé que una jovencita asi podria calentar con un tipo como yo. -Me volves loco nena. Me encanta tu cuerpo. - le decía mientras acariciaba sus tetas, cintura y cola. -Me gusta como me tocas con esas manos bien recias. Estoy toda mojada. - Con cada una de sus frases me ponía aun mas caliente. Supongo que se dio cuenta de mi situación porque cuando ya mi verga estaba por explotar contra el pantalón, sus habilidosas manos la liberaron. Sin decir palabras, se deslizo debajo de la mesa, y, siempre con esos preciosos ojos clavados en mi, comenzó a darme una mamada de ...
... película. El placer era extremo al ver desaparecer mi inflamada verga entre esos virginales labios. La situación de estar rodeado de gente me excitaba particularmente, era algo nuevo para mi, y probablemente a ella también la calentaba mucho. Su cabellera rojiza subía y bajaba sobre mi pelvis dándome una imagen exquisita de la joven amiga de mi hija. Ya casi llegando al climax, veo que se acerca un mesero y se para en el extremo de la mesa. -Puedo ir retirando los vasos, señor?- me pregunta, claramente sin darse cuenta de lo que estaba sucediendo bajo la mesa. -Sisi. claro. Vaya vaya. - logre decirle para que me deje tranquilo -Muy bien. - y se retiro con los vasos vacíos de la mesa Segundos después comencé a acabar como nunca agarrando a Flor de la nunca. Sentía su pera en mis huevos y su nariz en mi pelvis. Asombrosamente no se atragantó y logró tragarse hasta la ultima gota de mi espesa leche. Se incorporó a mi lado con un placentera sonrisa, y mientras se relamía me dijo: -Mas relajado ahora Osqui?- -No sabes. Hacia años que no acababa así. Sos perfecta. - -Y eso que todavía no probaste lo mejor, quiero una segunda dosis de tu leche. Que te parece si vamos a un lugar mas cómodo?- Ni lo pensé. Nos levantamos y fuimos hacia la puerta. Debía ser una imagen muy interesante para la gente del lugar. Era el típico viejo verde que se iba con una pendejita. No me importaba, yo iba agarrándola de la cintura. Probando ese cuerpo que en minutos estaría saboreando. El empleado del telo ...