1. Mi curso de postgrado


    Fecha: 26/07/2019, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... he dicho, los demás compañeros de viaje nos miraban, cuando Ricardo termino, otro compañero le dijo que si le permitía metérmela, Ricardo cambio de lugar con él y ya que yo me encontraba adormilada por el buen trabajo de Ricardo no me percate del cambio, Oscar me coloco en cuatro patas y busco mi culito, como yo nunca había permitido que me perforaran este hoyito, le dije que me tratara con cuidado ya mi culito era virgen, Oscar me chupo mi hoyito, llenándolo de saliva y al ver Ricardo que intentaba encularme, le dio un frasco con lubricante del cual me unto bastante en mi orificio, yo le dije que me permitiera chuparselo para dejarlo lleno de saliva y así lograr una penetración menos dolorosa, por un buen rato se lo chupe y pude apreciar que su verga tenia un mayor tamaño que la de Ricardo, lo cual me dio temor y le pedí que antes de metérmela por el chiquito me lo metiera en mi vajina para apreciar el tamaño, Oscar me complació y tumbándome en el asiento se coloco arriba de mi y me penetro, la entrada de su verga me causo un gran dolor ya que el grosor debía ser al menos de 7 centímetros, y contaba con no menos de veintitrés centímetros de largo, por lo que al tenerla hasta el fondo, sentí que me partían en dos, aguante un momento el dolor y cuando él inicio el mete y saca, el dolor disminuyo hasta llegar a provocar en mi deliciosos espasmos que anunciaban mi venida, él aumento el ritmo y pude lograr un orgasmo exquisito, como él no había logrado venirse, me dijo que ...
    ... deseaba perforarme el ano, lo cual le permití y le pedí que me untara mi chiquito con bastante lubricante, cuando sentí que me coloco la punta de su verga en la entrada de mi culito, trate de relajarme lo más posible, ya que su enorme verga estaba tratando de destrozar mi hoyito, después de algunos intentos, logro meter un poco más de la mitad de la cabeza de su verga, lo que me provoco un tremendo dolor y le pedí que ya no lo metiera, él empujo un poco más y empezó a avanzar centímetro a centímetro, yo sentía que me estaba destrozando mi culito, cuando logro meter toda su verga, tapándome la boca me dijo, ahora vas a sentir toda la verga, y la saco despacio y me la metió de un solo empujón, el grito que di fue sofocado por su mano y no me soltó hasta que yo empecé a gemir de placer con los tallones que me daba en mi culito, él tardo más de quince minutos en venirse y cuando lo hizo sentí como me inundo las entrañas con un gran chorro de leche. Después aunque algunos trataron de cogerme, yo no permití más, ya que la verga de Oscar me dejo destrozada. Dos noches después, nos encontrábamos en la habitación que se nos asigno a mi amiga y a mi, discutiendo y analizando la información de las actividades del día y una vez que concluimos el reporte, Ricardo propuso que jugáramos a la botella, le dijimos que eso estaba bien para jóvenes, pero que nosotros debíamos intentar algo diferente, a lo que él propuso que el juego se llamara la botella – strip, que no era otra cosa que jugar con la ...