1. Doña Amelia 4


    Fecha: 05/08/2019, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    Amelia es una mujer tan, pero tan impresionante, que cada día me sorprende más. Yo me reía de su cara al ver como había salido mi pija de su culo, "hay, que asco, que vergüenza, como me pudo pasar esto?", decía horrorizada al ver mi pija sucia con su caca, "es mi premio", le dije, entre carcajadas, no podía dejar de reírme, "tu premio?, vete a lavar eres un guarro", me dijo, sacándome a empujones de la cama para que me vaya a lavar, "y siempre me va a pasar esto?", me dijo, mirando mi cara y mi pija que estaba sucia, mientras me metía en la ducha, Amelia estaba roja de vergüenza por lo que le había pasado, "ven y nos bañamos juntos", le dije, ayudándola a entrar a la ducha, "lávate bien guarro", me decía, mientras daba otra exclamación de asco, cuando se empezó a lavar su culo y sacaba sus manos sucias, "o sea, que vos me decís guarro a mí, pero la que se cagó fuiste vos", le dije, riendo a carcajadas, ella como regañandome, me empezó a dar golpecitos en mis brazos, hasta que la abrace y nos besamos, "siempre me va a pasar esto?", me dijo, con una vergüenza que no podía disimular, "ojala", le dije, volviendo a besar su labios. Nos terminamos de duchar, y ella se vistió rápido ya que se le había echo tarde. Al otro día no vino, me extrañó, pensé que estaba tan avergonzada que no me quería ver, así pasaron dos días mas, yo estaba preocupado, la extrañaba y no por cogerla, es que me gusta esa mujer, no me importa la diferencia de edad, decidí ir a su casa, y en este pueblo ...
    ... cuando hay una defunción, pegan en los árboles quien falleció, y por curiosidad leo y era el marido de Amelia el que había fallecido, lo velaban en el Tanatorio que queda un poco mas haya de mi casa, me cambié y fui al velorio, necesitaba verla, acompañarla en un momento así, cuando entro, de inmediato nos vimos, sus ojos se le iluminaron, me acerco a ella y le doy las condolencias, me presenta a sus hijos, los saludo y me quedo junto a ella, quería abrazarla, que se sienta consolada, pero no podía, no era ético, "cariño, gracias por haber venido, esto me demuestra lo gran hombre que eres", me dijo, en un momento en que quedamos solos, así estuve con ella hasta que enterraron al marido, yo me fui a casa y ella a la suya con sus hijos. Yo salía siempre a la misma hora cuando nos veíamos para caminar y ella no estaba, al tercer día, siento el timbre del portal, contesto, y escucho su voz "ábreme", me dice, yo abrí el portal de inmediato y la esperé en la puerta de casa, entró, y se veía tristeza en sus ojos, apenas nos saludamos con un beso en los labios, "sabes que te extrañé mucho, y nunca voy a olvidar lo que haz echo por mi, acompañarme como lo haz echo", me decía agarrando mis manos con las suyas, era una calidez tan emotiva, en sus ojos, no solo la tristeza se reflejaban, sino que había como una chispa de amor, "te quiero", le dije simplemente, besando sus labios de nuevo, con ternura, "y yo a ti, tontorrón", me dijo, ahora ya el beso fue mas intenso, mas pasional, "que va a ...
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