Reencontrando al mejor de mis amantes
Fecha: 09/08/2019,
Categorías:
Transexuales
Autor: PaulinatvCDMX, Fuente: CuentoRelatos
... pagar mis compras, en eso siento que alguien apura su paso por detrás mío con la intención de alcanzarme y se pone a mi lado y me dice: F- Hola, espero no haberte asustado, debiste llevarte esas medias, en definitiva tus piernas las lucirían súper bien. Yo aún no acababa de acomodar las ideas, y es que en ese momento no lo reconocí, se miraba tan diferente a como yo lo conocí un par de años antes. Entonces el vuelve a hablar ante mi silencio: F- No puede ser que no me recuerde, Srita. Paulina? En ese momento en que me llamó por mi nombre femenino me volví a aterrar, es una sensación horrible, pues a pesar de que iba vestido como niño alguien me reconoció, por tal motivo apresure mi pasó con rumbo a las cajas, con la esperanza de que no me siguiera, en un momento mire de reojo y vi que ya no estaba, así que me sentí más tranquila pague mis compras y me fui para el estacionamiento, intentando descubrir en mi mente quién pudo ser el para reconocerme, cuando de repente al bajar al subterráneo Fernando me estaba esperando, y me dijo: F- Lamento si te incomode allá adentro, no era mi intención, por lo visto me borraste de tu mente, pero yo no pude, así que vuelvo a presentarme, soy Fernando Z******* y tuve el placer de conocerte hace ya un par de años. En ese momento lo reconocí, y esta vez fui yo la que hablo: P- Hola?? Awww que emoción saber que eres tú!! Discúlpame pero es que estás tan diferente!! Hace ya cuanto? 10 años?? F- Lo se, ahora soy más viejo debes pensar? P- No! No ...
... es eso! pero estás muy diferente, ahora utilizas barba, traes gorra y nunca antes te había visto con ropa deportiva. Por eso no te reconocí Cuando yo lo conocí yo tenía 19 años y él debía tener 42, por lo que era un delicioso hombre maduro según mis gustos. Y ahora según mis cuentas, a sus 52 años no se miraba para nada mal!! Fernando se veía guapísimo pero trate de no hacerle mucha fiesta!! Jijiji. Entonces el me pidió, mejor dicho, muy dulcemente me suplicó que le permitiera invitarme a tomar un café o una copa o lo que yo quisiera, para platicar de nosotros, y ponernos al día, yo me ruboricé de inmediato y me disculpé muy sentida y honestamente por no poder hacerlo, él me pidió entonces mi teléfono y quedamos en que me hablaría en la noche, cosa que hizo y platicamos mucho, le conté todas las últimas cosas que me habían sucedido y él a mí las suyas, hablamos casi durante dos horas y quedamos en que lo recibiría el viernes en mi departamento por la noche para tomar esa copa que había quedado pendiente. Unos golpecitos en la puerta me sacan de mis pensamientos, me levanto del sillón, me acomodo la falda y me miró en el espejo de la vitrina de la pequeña cantina de mi sala, me acomodo un poco el cabello y me pregunto a mí misma: P- lista Paulita? Y con mis piernas temblorosas como si fuera por primera vez a verlo, me dirijo a la puerta, veo por la mirilla y se me paraliza el corazón por la emoción y el júbilo al ver a Fernando, abro la puerta y dejo que pase. El dice: F- Estas ...