Una mano experta - Relatos Eróticos

Una mano experta

... contener su jadeo ahogado al tacto débil. Él piensa que tal vez esta es la señal que quería seguir Ken, porque su barbilla deja de estar en el esternón de Daisuke mientras gira su cabeza hacia un lado para recostarse en el pecho de Daisuke. - Tu corazón está latiendo como loco -. murmura Ken sonando encantado. Teniendo misericordia, se detiene agonizantemente pasando un dedo por la piel hipersensible de la parte inferior del abdomen de Daisuke y engancha un pulgar debajo de la cintura, empujándolo a mitad de sus muslos. Ken hace un pequeño gemido de satisfacción cuando la polla de Daisuke salta de la tela para hacer un ruido de golpe contra su estómago, como si estuviera exaltado, Daisuke siente vergüenza mientras que su cuerpo se va tensando por completo. Sin vacilar, Ken lame la palma de la mano y envuelve sus dedos alrededor de la base de la polla de Daisuke moviéndose y moviendo la cabeza experimentalmente. Pequeñas gotas de semen se reunieron en la punta y Ken se asegura de extender y utilizarlo para facilitar el camino de regreso. El movimiento es dolorosamente lento, más provocador que casi una estimulación real, y Daisuke gime profundamente en su garganta. Ken olfatea el pecho de Daisuke a través de su camisa, y sabe que está satisfecho de haber creado un toque tan frustrado. - Eres terrible -. Daisuke y su voz se ...

... agrieta en la última sílaba. Él sólo quiere explotar, él siente que sus terminaciones nerviosas están en llamas por estar en el borde por tanto tiempo. - por favor, simplemente... - vuelve a decir cortando la frase con un gemido largo y profundo porque Ken ha cambiado su tempo, apretó el puño alrededor de la longitud de Daisuke y bombeando con nuevo vigor. Una de las manos de Daisuke se encuentra sujetando la parte de atrás de la camisa de Ken como un vicio y su cabeza empujando hacia atrás en la almohada porque la estimulación era demasiado. Él se viene entre lagrimas sobre su abdomen y la mano de Ken. Ken se lanza a través de él sintiendo como su polla se suaviza con la debil eyaculacion, quiere seguir, no se detiene hasta que Daisuke gimotea porque se ha vuelto doloroso de hipersensibilidad. Cuando Ken se arrepiente de sus toques despiadados, se sienta y Daisuke está momentáneamente decepcionado. Entonces, Ken arrastra sus dedos ya ensuciados de la dulzura de su chico por el vientre y del estómago de Daisuke antes de chuparlos en su boca, sonriendo todavía con altos signos de satisfacción, Daisuke quiere morir Ken habia hecho un buen desastre arruinandole el orgasmo y dejandole con ansias de probar un poco más, deseaba, más que dejarle con el orgasmo en la boca, tatuar un gemido en el alma y un recuerdo en su memoria.