Compañeros de Piso
Fecha: 23/08/2019,
Categorías:
Anal
Gays
Sexo Duro
Autor: predatorgapes, Fuente: xHamster
Mi nombre es Santiago y tengo 20 años. Mido 1.68, de complexión delgada, aunque siempre he intentado mantenerme en forma, y tengo un trasero duro y redondito.A un par de meses de iniciar un nuevo semestre en la Universidad, me encontré en la necesidad de buscar otro lugar para vivir. La casa donde estaba compartiendo con seis chicos más, simplemente dejó de agradarme.El compartir el día a día con tanta gente llega a ser demasiado cansado. Al inicio era agradable, nos llevábamos bien y, aunque no lo admitiría nunca frente a ellos, me deleitaba con ese desfile de cuerpos semidesnudos, y en ocasiones completamente desnudos, que formaba parte de mi rutina.Ellos sabían que era gay, pero como nunca hice ningún intento con ellos y, cuando me ponía muy caliente al verlos en pelotas por la casa o masturbándose en el sillón durante el día, calmaba mis pasiones con algún compañero de clase o desconocidos en bares, nunca hubo problema. Claro que había un par de mis compañeros con los que fantaseaba. Tenían un cuerpo bien esculpido y sus pollas eran muy grandes. Cuando me tocaba verlos desnudos, de inmediato llamaba a alguien para que me follara, porque la tentación era muy grande. Si algo siempre me quedó en claro era que no debía intentar nada con un compañero de casa, tan solo para evitarme problemas a la larga.No fue por esto que decidí mudarme. Era demasiado el deleite de verlos desnudos como para irme solo por esa razón. No. Fue algo más sencillo: en una casa, no tan grande, ...
... con seis personas viviendo en ella, nunca te sentías solo.Quizás por eso eran tan desinhibidos y hasta se masturbaban con uno cerca. Pero a mí no me sentaba bien eso. Era hijo único y nunca había sentido que no tenía espacio personal en mi propia casa.Así que, alegando que quería algo más cerca de la Universidad, decidí mudarme.No fue tan fácil como imaginé.Tras semanas de ver anuncios, contactar caseros y visitar departamentos y habitaciones, estaba casi tirando la toalla.Fue entonces que me enteré que el conocido de un amigo estaba buscando compañero de departamento. Vivía en un edificio cercano al campus, y aunque el departamento no era nuevo ni muy espacioso, solo viviría con una persona más y cada quién tendría su habitación. De inmediato, me contacté con él.Así conocí a Rodrigo, un estudiante de Ingeniería de mi misma Universidad, un par de años mayor que yo.Mediría casi 1.80, lo que lo hacía más alto que yo, no era exactamente atlético, pero tenía buen cuerpo. Su tez era morena y tenía un par de ojos verdes que contrastaban muy bien. Era atractivo, a mi parecer, aunque no actuaba como si lo supiera o le importara.Me explicó que el departamento había sido de su abuela y que se lo había dejado para cuando inició la universidad. Tenía dos habitaciones, un cuarto de baño, una cocina con lo necesario aunque no era muy espaciosa, una mesa con dos sillas que la hacía de comedor, una sala con un solo sillón algo viejo y un televisor que parecía ser lo más nuevo de todo el ...