mi pequeño sobrino (segundo dia)
Fecha: 23/08/2019,
Categorías:
Incesto
Autor: soysofi, Fuente: SexoSinTabues
segundo dia con mi pequeño sobrino Desperté cerca de las 5:30 de la mañana, esteban seguía durmiendo pero mi esposo ya se había levantado, caía agua de la regadera, Por lo que supe que se estaba bañando. Mire a esteban y le di un beso en la mejilla, lo sucedido la noche anterior me excitaba, sentí la necesidad de otra sesión de sexo, pe sería un pecado perturbar sus sueños. Sentí que la puerta del baño se abría y me dirigí a la cocina, salude a mi esposo con un “buenos días” y un abrazo. Prepare únicamente su desayuno, ya que era sábado y más nadie tenía que ir a ninguna parte, al menos temprano. Habiendo terminado de comer, mi esposo se fue y yo volví a la cama a seguir durmiendo. Desperté cerca de las 8, no porque mi sueño había acabado, sino porque mi sobrino estaba acariciando uno de mis pechos, estaba de pie junto a mi con una tasa de café—hola mi rey—le dije sonriente por tan bello despertar. -buenos días tía, ya todos nos hemos levantado menos tú, paula preparo el café y el desayuno. Todo esto lo decía mientras seguía tocando mi pecho, para devolverle las caricias yo metí mi mano dentro su pantalón y acaricie la pequeña cabeza de su verguita. Risas se oían tras la puerta de la habitación, ambos retiramos nuestras manos y fuimos a desayunar. Paula mi hija había preparado unos emparedados, Andrés estaba viendo tv, juan y mi hija estaban sentados en la cocina. Tome mi comida y me senté junto a ellos. Esteban seguía mis pasos y se sentó junto a mí, la mesa en donde ...
... estábamos traía encima un gran mantel, lo que le brindó la oportunidad a mi sobrino para tocarme sin que nadie se diera cuenta, sus manitas tocaban por encima de mi panti, eran toqueteos inexpertos, pero he de admitir que a veces daban en el punto exacto y me hacían estremecerme. Con una mano jugaba con su pequeño carro encima de la mesa y con la otra trataba de deslizarme la panti y meterme sus deditos. Empecé respirar entrecortadamente, trate de disimularlo y afortunadamente mis hijos no se daban cuenta. De un momento a otro esteban se levantó y empezó a jugar en el suelo, supuse cuales eran las intenciones, quizás se metería debajo de la mesa y empezaría a tocarme nuevamente. Paula empezó a contarme sus planes de hoy, al parecer saldría antes de mediodía con sus amigas y regresaría en la tarde, yo la escuchaba por inercia, mis ojos no se desviaban de esteban que se estaba dirigiendo bajo la mesa, una parte de mi quería regañarle pues no era prudente, pero otra parte de mi quería que se apurara. El pequeño demonio me hizo sufrir, ya que tardo como 10 minutos bajo de la mesa y yo aún no sentía nada, empecé a pensar que había imaginado mal y que solamente estaba jugando como un niño inocente. Sin embargo lo que paso era lo menos esperado, esteban paso su lengua por mi entre pierna casi llegando a mi vagina, estaba sentada con mi espalda recta, por lo cual su lengüita no pudo llegar a mi raja. Tras aquel contacto mi rodilla se movió y golpeo la meza, por lo cual mis hijos se ...