COMO TERMINÉ SIENDO EL AMANTE DE MIS VECINOS - Relatos Eróticos

COMO TERMINÉ SIENDO EL AMANTE DE MIS VECINOS

No sé si existirá muchas historias como la mía, al menos aquí no las he leído, aunque imagino las habrá, soy un hombre soltero de 36 años, he tenido infinidad de aventuras con mujeres, la fidelidad como la convivencia no es mi fuerte, pues siempre he adorado mi independencia, nunca he convivido con una mujer, tampoco le he sido fiel, hasta que comencé la siguiente historia. Todo comenzó, tras mudarme a vivir a una urbanización en las afueras, me definiría como hombre de clase media mas bien alta, aunque tampoco soy millonario, tengo una buena casa un buen coche y un buen trabajo, me considero una persona culta,, deportista, atractivo, no guapo, sino atractivo, suelo gustar a las mujeres, mido 1,82 peso 86 kilos, fuerte, bien dotado 21 cm y ese es mi único vicio el sexo, soy ademas lanzado para nada tímido, pero educado, cuando empecé a conocer mis nuevos vecinos, pues la urbanización esta habitada aún menos de la mitad por la crisis. De los primeros que conocí y con el tiempo fueron los que mas confianza he tenido fueron una matrimonio, Jesús y Nina, yo tenia 33 años recién cumplidos, él 42 años ella 40 años, con un niño, pero sigamos lo importante para ustedes. Pronto se convirtieron en amigos más buscandolo ellos que yo, pero no me importó, me agradaba mucho estar con ellos, su amenza conversación su simpatia y cierta atracción que me producía Nina, pero siempre guardando las distancias por supuesto ni tampoco ella me insinuó nunca nada por supuesto, no es su nombre, ni ...

... el de su marido por supuesto, delgado pero un hombre guapo a su edad, con una figura androgina, barbilampiño, aunque como siempre suele vestir en traje de chaqueta no suele revelarse ese tipo de figura, así pasó el primer año, fortaleciendo esa amistad. Para mi en esa época si me hubieran pedido definirlos los definiría como un matrimonio perfecto enamorado uno del otro, sin problemas y felices, sin imaginar una vez a solas claro que tenian problemas y muchos solo que todos eran relacionados con el sexo, pero eso son problemas, que suelen quedarse ahí dentro de casa y en la intimidad y si buscan algo suelen buscarlo lejos donde no son conocidos nadie. Aquella tarde, quedamos a tomar un café tras salir del trabajo Jesús y yo, como tantas veces y como alguna que otra vez, eso llevo a la copa despues a otra y a las confesiones, o el hablar mas de lo preciso, yo habia recogido como siempre a Jesus de un parking donde tenia su coche y fuimos con el mio, a tomar el café y tras el primer cubata, comenzamos a charlar de sexo, yo la noche pasada habia estado con una chica en mi casa, se lo comenté entre otras cosas, de ahí él pasó a charlar sobre el sexo gay, yo lo escuchaba de forma inocente tras servirnos el segundo cubata, haber llamado a su mujer para decirle que llegariamos algo mas tarde, así terminamos de beber ese cubata pagamos y nos fuimos sin él dejar la conversación por el camino hacia mi coche ya de noche, en la ciudad, entramos en él, arranqué él quedó en silencio, me ...