Sexo de otro mundo (literal, tuve sexo con mujeres extraterrestres) - Relatos Eróticos

Sexo de otro mundo (literal, tuve sexo con mujeres extraterrestres)

... vidas" Me siento tan halagado y especial... "ya basta de preguntas mi macho elegido, cállate, relájate y disfrutemos" (si, ahí pude constatar su enorme fuerza). Me empezó a frotar su piel por todo mi cuerpo, a pesar de su fuerza física, su piel era suave y delicada, hasta pude notar pequitas. Ella estaba en verdad hambrienta de sexo, su piel sudaba cada vez que la tocaba, y su olor era en verdad como si se hubiera perfumado con lo más caro, solo que era su verdadero olor. No sabía besar, quería saborear mi boca intentándolo, para terminar mordisqueando tiernamente la barbilla, la nariz, las orejas, el cuello, la nuca... Yo la tomé de su exótico pero muy bello rostro y la besé, y le fui buscando su lengua rosadita y con el paso de los momentos, dominó y aprendió a darme besos. En su mirada solo había placer, no era para menos, era una experiencia que ella jamás volvería a vivir en su vida. Ella empezaba a mordisquear y lamer todas las partes de mi cuerpo, mi olor le fascinaba también (aunque para mi vergüenza, posteriormente me dijeron que cuando estaba inconsciente me habían bañado, vacunado y desinfectado por precaución). Ella llegó a mi pene, lógicamente no sabía manipularlo para darme excitación así que le fui indicando y luego empezó a hacerlo cada vez mejor. La detuve, le hice entender que si seguía iba a hacerme perder su oportunidad de embarazarla como era la misión. Entonces, invertimos papeles y seguí explorando ese cuerpo sideral. Llegué a su vulva, como ya ...

... comenté, diferente a las de las mujeres de nuestro mundo, ya que sé que todas lo tienen de color oscuro, ella no, lo tenía del mismo color de su cabello, así como liso, suave, no era desagradable para nada lamer esos pelos púbicos. Ella empezó a gemir y hacer unos sonidos que me recordaban que no era una humana misma que parecían unos gruñidos de gatos juguetones. Ella sobra decir que estaba muy excitada, muy mojada, y esos jugos eran deliciosos, ojala ustedes pudieran saborear esos jugos si les dan esa oportunidad, unos zumos de delicioso sabor que no dejaba de seguirle lamiendo hasta que ella no aguantó más y se vino. Su vagina estaba tan excitada que tuvo su eyaculación de jugos vaginales que nos dejó a ambos bastante mojados y divertidos. Yo ya no aguantaba tampoco las ganas de penetrarla y me dispuse a explorar ese nuevo mundo. Oh, no sé por qué me sorprendí, tenía que haberlo sabido, tenía himen, es virgen. "Si, es lo que ustedes llaman himen, esa es la capa que tenemos que quitar como primera parte de nuestro ritual para convertirnos en adultas y madres" me dijo. Yo introduje un dedo y ella sintió placer y algo de dolor, se le notaba en su rostro. Fui poco a poco, otro dedo y otro más, hasta que le metí los 5 dedos de mi mano. Luego de la misma forma se los fui sacando, ella solo gemía y gruñía de placer. Me dispuse a introducirle mi pene que ya estaba más que listo hacía rato pero ella me detuvo mirándome toda picara. "espera, quiero tocar tu pene e introducirlo yo misma en ...